Un modisto debe ser un arquitecto para los planos, escultor para la forma, pintor para el color, músico para la armonía y filósofo para la medida.
La armonía de los colores debe fundarse únicamente en el principio del contacto adecuado con el alma humana, es decir, en lo que llamaremos el principio de la necesidad interior.
El hombre de genio ha de obtener lo que necesita para no depender de nadie. Mas si obtenida esta tranquilidad pierde el tiempo en aumentar su fortuna, no es un hombre de genio, sino un miserable
Sólo habrá tranquilidad en Europa cuando haya un solo jefe, un solo emperador que tenga por oficiales a los reyes y distribuya los reinos a sus capitanes
El verdadero Budo es la protección de todos los seres con un espíritu de reconciliación. reconciliación significa permitir la consumación de la misión de cada una.
Quien primero planteó la necesidad de superar la Guerra Civil y la reconciliación de los españoles fue el PCE
Por ley de historia, un perdón puede ser un error, pero una venganza es siempre una infelicidad. La conciliación es la ventura de los pueblos.
Los Acuerdos de Paz son nuestro legado a las nuevas generaciones. Los ponemos en manos del pueblo de Guatemala para que los levanten como bandera de lucha a favor del bien común, la conciliación nacional, la democracia y la paz.
Para conseguir el feliz éxito, y la deseada felicidad a que aspiramos, os recomiendo á nombre de la Excelentísima Junta vuestra protectora, y en el de nuestro amado jefe, una unión fraternal, y ciego obedecimiento á las superiores órdenes de los jefes, que os vienen a preparar laureles inmortales.
María recibe con gozo el anuncio de que será madre de Jesús, el Hijo de Dios hecho hombre. La auténtica alegría nace de la unión con Dios.
... Ampara la ilegalidad... anda chalaneando con terroristas para ver si le venden una tregua como sea....El señor Zapatero parece que tiene de adorno la cabeza
El suicidio sólo debe mirarse como una debilidad del hombre, porque indudablemente es más fácil morir que soportar sin tregua una vida llena de amarguras.
Cuando Foch oyó que se había firmado el tratado de Versalles, dijo con singular justeza: Eso no es una paz, es un armisticio de veinte años
Las riñas amorosas raramente acaban en una paz verdadera; normalmente se trata de un simple armisticio que se conceden mutuamente las paces para enterrar a sus muertos. Luego, cuando se reanuda la batalla, vuelven a sacar a la luz hasta a los muertos, y continúan luchando envueltos en vapores de descomposición.
Tampoco estamos dispuestos, como dice el proverbio, a elegir a nuestro propio carnicero. Estamos decididos a defender nuestras vidas con toda nuestras fuerzas, sin importarnos si el resto del mundo ve la necesidad de esta batalla o no. ¡La guerra total es, por lo tanto, la orden de la hora presente!
Todo lo que ocurre, ocurre. Todo lo que, al ocurrir, origina otra cosa, hace que ocurra algo más. Todo lo que, al ocurrir, vuelve a originarse, ocurre de nuevo. Aunque todo ello no ocurre necesariamente en orden cronológico
La moderación de las personas felices se debe a la placidez que la buena fortuna da a su temperamento.
El Campanil, cortándose sobre los oscuros pinares y en el luminoso raso del firmamento, es bello. Será siempre bello. Va a ser el símbolo universitario por excelencia, signo de rectitud y elevación, columna que difundirá en las almas goce, placidez y serenidad, flecha que apunta a la altura, como la filosofía, donde más allá de las nubes que amedrentan, triunfa la claridad celeste
El ser humano que quiere alcanzar la perfección debe mantener la serenidad y la calma, sin permitir que una pasión o un deseo circunstancial se entrometa en su espíritu.
La literatura. A lo que no tenga encanto y cierta serenidad no podremos llamarlo literatura. Incluso en la crítica debe hallarse alguna amenidad; si falta por completo, entonces ya no es literatura. En los periódicos encontramos todo el tiempo esta repelente controversia. Donde no hay ninguna delicadeza no hay literatura.