Durante muchos años las víctimas del terrorismo han estado bien tratadas, pero ahora estamos asistiendo a un panorama totalmente distinto. Incluso hay quienes dicen que son los culpables de que no haya paz
Todo curiosamente se va ajustando, serenando. Las incógnitas sombrías que se alzaron al comienzo del viaje se han ido despejando hasta llegar al escueto panorama presente.
Me dicen que abra los ojos y contemple las bellezas que el sol alumbra; que admire sus montañas, sus valles, sus torrentes, sus plantas, sus animales y no sé cuantas cosas más. Pero entonces, ¿el mundo no es más que una linterna mágica?. Ciertamente el espectáculo es espléndido, pero en cuanto a representar allí algún papel, eso es otra cosa.
El espectáculo de lo que es bello, en cualquier forma que sea presentado, eleva la mente a nobles aspiraciones.
Tu visión devendrá mas clara solamente cuando mires dentro de tu corazón... Aquel que mira afuera, sueña. Quién mira en su interior, despierta.
Una buena sociedad es la que sabe aprovechar los compromisos entre intereses contradictorios. Si renunciamos a esa visión del paraíso terrestre, que era la que estaba detrás de la política totalitaria, porque soñaba con construir el paraíso terrestre, aunque se renunciara a esa visión, sería indispensable que fuéramos conscientes de los peligros que socavan nuestra existencia.
Somos siluetas recortadas, somos hueros fantasmas que se mueven en la niebla, sin perspectiva
Aristóteles ha realizado un análisis del tiempo muy meticuloso, pero ha dejado sin responder la pregunta fundamental. En su Física sostiene que el tiempo se mide por el movimiento desde una perspectiva de un antes y un después. Pero lo que dejó sin responder es cuáles esa perspectiva, ¿La del alma humana o la de la naturaleza misma?
La educación como práctica de la dominación que hemos venido criticando, al mantener la ingenuidad de los educandos, lo que pretende, dentro de su marco ideológico, es indoctrinarlos en el sentido de su acomodación al mundo de la opresión.
... Su visión internacional que lo llevaba a contemplar y a analizar los problemas españoles encuadrados en un marco universal. Esto es (...) lo que más contribuyó a hacer de Negrín un gobernante moderno, enteramente limpio de ese tufillo pueblerino, de política de campanario, que con algunas excepciones muy honrosas, caracteriza la vida política española contemporánea.