Un asesinato es un caso vulgar, un hecho más o menos vivo de bestialidad, de ferocidad. Es lo corriente, y más corriente todavía procesar por estas cosas. Mientras unos se entretienen en poner pinceladas azules en el lienzo de la vida, para que se las aplaudan, otros rabian por ponerlas rojas, para que la justicia tenga que intervenir.
Pierde los temores y convierte en mariposas las serpientes, que después de la tormenta calma habrá, no dudes, siempre navegar contra corriente vuelve fuerte, si no pierdes el faro que esta al final, nunca dejes cabos sin atar, nunca dejes guerras sin luchar.
El lector no encontrará figuras en este trabajo. Los métodos que he establecido no requieren construcciones ni razonamientos geométricos o mecánicos: sólo operaciones algebraicas, sujetas a una regla de procedimiento regular y uniforme
Los columnistas se manejan de otra manera: no pueden distanciarse de los políticos. Así es, mas pueden regular su distancia. Hay quienes se ufanan de comer con los políticos, es cierto, y exhiben su cercanía con los funcionarios porque con eso quieren advertir que ellos, los periodistas, también son importantes. Es una tontería, por supuesto
Es desgracia habitual en los ineptos la de engañarse al elegir profesión, al elegir amigos y al elegir casa.
El enfoque habitual de la ciencia de construir un modelo matemático no puede responder a la pregunta de por qué hay un universo que describir para el modelo. ¿Por qué el universo se toma la molestia de existir?
Pero la clase más usual de conexión entre los distintos sucesos que forman parte de cualquier composición narrativa es la de causa y efecto.
Los precios o, con otras palabras, las cantidades de bienes que deben aparecer en el intercambio, configuran, en cuanto que son percibidas por nuestros sentidos, el objeto más usual de la observación científica, pero están muy lejos de constituir la esencia del fenómeno económico del intercambio.
El traslado de la responsabilidad distorsiona la opinión pública. El pueblo, acostumbrado a esperar todo del Estado, no acusa a éste de hacer demasiado, sino de no hacer suficiente. El gobierno es derrocado y se instala otro, y el pueblo clama: hagan más que el anterior. Y así, el abismo se hace más y más profundo.
Otros que ganaron más que él no se comportaron así, será que no está acostumbrado a ganar títulos
La cantidad de renta que se puede adquirir por la compra de una tierra (...) es una medida manifiesta y limitada por la naturaleza (...) esta misma ley es la que debe regular el tipo de interés o de la renta del dinero invertido en la constitución de censos perpetuos en un reino agrícola.
La única utilidad inmediata de todas las ciencias es enseñarnos cómo controlar y regular acontecimientos por medio de sus causas
Si hemos de tomar en serio el respeto por la persona humana, debemos medir el progreso por el grado en que se puede pretender que las grandes masas del pueblo se mantengan con sus propios recursos y bajo su propia responsabilidad, mediante el ahorro y el seguro, y las múltiples formas de ayuda voluntaria de grupo.
No, creo que soy una de esas personas cuya memoria falla cuando está bajo presión. ¡Las respuestas vienen a mi en mitad de la noche mientras duermo!. De todas formas, ya soy millonario.
¡Todo el mar no bastó para dejar sin huella el breve trigo que dejó tu beso!
Una tumba basta para aquél a quien no bastó el mundo.
Venturoso o no, el amor auténtico se oculta; el pudor es la mitad de su poesía. Un amante es un iniciado; no elevará en el arroyo el ara ni el altar. No expondrá al escándalo las embriagueces de su victoria, ni la liquidación de sus desastres. Quizá sucumba en un rincón, mas no representará gratis, ante la tribu reunida, una escena vulgar de quinto acto.
Ninguna cosa está más lejos de la verdad que la vulgar opinión.
El que grita estando colérico es tan patán como el que ríe a carcajadas
Recuerdo que, a la muerte de Pío XII, nos decíamos: ¿quién podría alcanzar sus cotas de sublimidad y trascendencia? Entonces vino Juan XXIII, un anciano regordete y bajito que al sentarse mostraba los pantalones debajo de las vestiduras sagradas. ¡Y ese hombre rústico nos trajo la renovación de la Iglesia!
Me gustaría disculparme, retractarme y fustigarme a mí mismo públicamente hasta obtener el perdón de las personas a las que de manera involuntaria hubiese o hubiera podido ofender a través de mi personaje Torrente, un ser despreciable, mezquino, mal cristiano, mala persona, guarro, zafio y grasiento, con el que, insisto, una vez más, no comparto ninguna de sus opiniones o visiones del mundo.
La palabra más soez y la carta más grosera son mejores, son más educadas que el silencio.
Tal vez acá y allá, algún tosco piloto cargado de años, metido en su rincón y del que nadie se preocupa, pueda hacer en secreto unos sondeos con una cuerda vieja y una plomada, y murmurar palabras de aviso que el capitán y los marineros no escuchen por estar demasiado ocupados.
Para mí, escribir significa hacer un borrador tosco y pulirlo a lo largo de un período de tiempo considerable.
Por mucho que se enmascare con un esteticismo hortera o con un flato poético, una corrida de toros en directo o en diferido es el espectáculo basura por excelencia, aunque lo presida el Rey de España y le guste a algún chino.
La nobleza del plebeyo consiste en no avergonzarse del nombre de su padre.
Los que ayer fueron bosques y selvas de agreste espesura, donde envueltas en dulce misterio al rayar el día flotaban las brumas, y brotaba la fuente serena entre flores y musgos oculta, hoy son áridas lomas que ostentan deformes y negras sus hondas cisuras
En la agreste infancia de la meseta burgalesa pedía a mis buenas niñeras del páramo que me contaran una historia de lobos, y con estas historias me dormía, arrullado por la seguridad de la casa, dulce y confortable
La más antigua de las sociedades y la única natural es la familia El contrato social 1762
Es evidente, pues, a partir de lo dicho que fuera del universo no existe ni cabe que se genere la masa de ningún cuerpo; por consiguiente, la totalidad del mundo consta de toda la materia que le es propia; en efecto, vimos que su materia propia era el cuerpo natural y sensible.
La plegaria es la primera y la última lección para aprender el noble y bravío arte de sacrificar el ser en los variados senderos de la vida.
La impresión que tuve la primera vez que fui a Inglaterra es que, quitando las elites de las grandes ciudades y a Newton y Darwin, son unos bárbaros. Claro que eso es mucho quitar, pero los ritos antiguos, las familias comiendo un pedazo enorme de pierna de cordero, el modo de comportarse, el tipo burdo de trato... Y no digamos los alemanes.
Para dos intuitivos el lenguaje es un obstáculo, un burdo impedimento.
La civilización es precisamente el esfuerzo por ir más allá de la propia cultura, lo que hace sentir curiosidad e interés por otras. A quien se encierra en los usos que conoce, los considera sin disputa preferibles a todos los restantes y muestra antagonismo cerril hacia las formas de comportamiento humano que no comparte, siempre se le ha llamado bárbaro, nunca civilizado.
...los hombres saben mejor que las mujeres, saben recio como cochino salado, como jamón, da gusto comer un buen macho, las mujeres saben dulce como quien come flores y te dejan él estomago flojo como si no hubieses comido.
Y cuando sonríe incluso me parece que este cochino mundo tiene algo de futuro
No importa lo bueno que soy, sigo siendo sólo un paleto de French Lick.
El máximum del arte pedestre estaba allí, en ese cuadro de La mujer hidrópica, pintado sin pretensión alguna, pero con una nobleza que lo supera todo, una cantidad de matices tal que no se puede imaginar que un ojo humano los hubiera advertido. La fotografía jamás será capaz de sutilezas semejantes. Es la voluptuosidad total.
Rodeado de estudiantes deslumbrantemente brillantes, no estaba seguro de que pudiera terminar el grado. Sin embargo, recordando la frase de Edison de que el genio contiene un 99 por ciento de transpiración, descubrí un prosaico secreto hacia el éxito. Yo podría trabajar más duro que la mayoría de ellos
Hay que tener un marido prosaico y tomar un amante romántico.
El libertino más ramplón ha soñado alguna vez con sultanas, y todos los notarios llevan dentro de sí las ruinas de un poeta
Como el almendro florido has de ser con los rigores, si un rudo golpe recibes suelta una lluvia de flores.
Veo al final de mi rudo camino que yo fui el arquitecto de mi propio destino; que si extraje las hieles o la miel de las cosas, fue porque en ellas puse hiel o mieles sabrosas: cuando planté rosales, coseché siempre rosas.
Cuanto más disminuye la importancia social propia de un arte, tanto más se afirmará en el público el divorcio entre una actitud crítica y el placer puro y simple. De lo convencional se gusta sin criticar, mientras que se critica con disgusto lo que en verdad es nuevo.
Para que una película parezca prodigiosa a los espectadores (...) hay que acabar el repugnante ritmo cinematográfico actual, esta convencional y enojosa retórica del movimiento de la cámara. ¿Cómo creer en el más banal de los melodramas cuando la cámara sigue al asesino por todas partes en trávelin, hasta el lavabo donde va a lavarse la sangre que mancha sus manos?
Probablemente no haya habido ningún otro periodo en la historia, en este o en cualquier otro país, en el que el hombre de a pie haya experimentado una mejora tan grande de su nivel de vida como en el periodo transcurrido entre la guerra civil y la Primera Guerra Mundial, cuando más fuerte era el individualismo desenfrenado.
La política, bien entendida, se parece más al comercio que a la guerra. Tiene más de competencia que de confrontación. Necesita la concertación de voluntades. A mediano plazo, el juego limpio resulta más redituable que el golpeteo. La solidaridad vale más que la competitividad
Era una mujer de mediano entendimiento, información escasa y temperamento caprichoso.