El espíritu del hombre es indivisible; y yo no me duelo de esta fatalidad, sino, por el contrario, la reconozco como una necesidad de plenitud y coherencia. Declaro, sin escrúpulo, que traigo a la exégesis literaria todas mis pasiones e ideas políticas, aunque, dado el descrédito y degeneración de este vocablo en el lenguaje corriente, debo agregar que la política en mí es filosofía y religión.
Yo no soy patriota. Este vocablo que hace más de un siglo significaba la revolución y libertad ha venido a corromperse y hoy manoseado por la peor gente incluye la acepción, más relajada de los intereses políticos y expresa la intransigencia, la intolerancia y la cerrazón mental
Cuando estaba escribiéndola (I'm Not Okay) recordaba que era tener 16 años en la secundaria. Siempre deseé ser artista, así que era el chico solitario que siempre se emborrachaba. Solo tenía un buen amigo. Había una chica que me gustaba mucho y terminó sacándose fotos de muy mala calaña con su novio. Eso realmente me aplastó y terminé nadando en un pozo de desesperación, celos y alcohol
Irás con más seguridad por el término medio
La arquitectura debe de ser la expresión de nuestro tiempo y no un plagio de las culturas pasadas.
Si merezco algo de gratitud pública, no es por los palacios que hice, sino por haber abordado el problema de la arquitectura, el arte, la expresión de la sensibilidad humana. Sentí que la vivienda era el lugar de la familia, y que se podría probar algo grande por ese lado, en que hallé que había gran parte de la felicidad humana.
La dicción no debe ser rápida ni apresurada, y, por lo tanto, ininteligible, sino pausada y lenta.
Cuanta más poesía leemos, más aborrecible nos resulta cualquier tipo de verborrea, tanto en el discurso político o filosófico, como en los estudios históricos y sociales, o en el arte de la ficción. El buen estilo en prosa es siempre rehén de la precisión, de la rapidez y de la lacónica intensidad de la dicción poética.
Mi lengua y mi estilo son tan imprecisos que en esto me quedo atrás con respecto a muchos malos escritores. Hasta un principiante o un escolar puede reírse de mi lengua. Cuando cojo la pluma, me siento como paralizado.
Mi lengua es una lengua viva. Utilizo frases hechas, lengua coloquial, juegos de palabras, que no necesariamente funcionan en otras lengua...La suerte de los poetas en el exterior depende de los traductores.
(...)Cada uno de nosotros es una península, con una mitad unida a tierra firme y la otra mirando al océano. Una mitad conectada a la familia, a los amigos, a la cultura, a la tradición, al país, a la nación, al sexo y al lenguaje y a muchos otros vínculos. Y la otra mitad deseando que la dejen sola contemplando el océano.
La literatura es algo totalmente artificial. Y justamente para captar realidades, debe ser artificial. Los diálogos generalmente no son lenguaje hablado, oral. El lenguaje oral en un libro es algo diferente al lenguaje hablado. Para que el lenguaje oral funcione tiene que ser artificial.
Nunca, ni siquiera ante un ruego, administraré algún veneno letal como tampoco daré consejo para eso; nunca daré a mujer alguna supositorio para que aborte. del El juramento de Hipócrates en la obra La historia del aborto por Robert Jütte, pp 33, según la traducción Deichgräber
Aquello fue tan triste y tan negro como una visita de pésame en el Níger, y sólo bajo juramento podía creerse que se trataba de la primera audición de una comedia cómica que justamente un año más tarde, había ya recorrido triunfalmente todos los escenarios de España
Oyes el graznido de la última gaviota cerrando su pacto con el rumor dulce de la espuma, y tú, vas y vienes sobre la corriente con el alfabeto del mar entre tus manos.
Sigo pensando que es otra cosa la poesía: una forma de amor que sólo existe en silencio, en un pacto secreto entre dos personas, de dos desconocidos casi siempre.
El cuerpo de una mujer mayor, a diferencia del cuerpo de un hombre viejo, se entiende como un cuerpo que no permite exhibición, ofrecimiento ni desvelamiento.
Asumí un compromiso solemne: ser el primer soldado de la Patria
Es difícil tener su propia muerte. Aunque parezca tan fácil. Es un arte. Una tarea. Un compromiso desmesurado. Quien sea capaz de cumplirlo, no muere. Sigue viviendo en la medida en que su muerte haya sido auténtica. Vivida.
La calidad es nuestra mejor garantía de la fidelidad de los clientes, nuestra más fuerte defensa contra la competencia extranjera y el único camino para el crecimiento y los beneficios.
Durante siglos su presencia solamente tuvo un valor simbólico que han pagado muchas mujeres; pero en la actualidad la virginidad ya no se considera un valor ni una garantía de pureza.
El único problema con algunas vidas es la falta de compromiso y ganas de vivir una propia.
En una patria llena de dificultades el entusiasmo la actitud siempre positiva la sonrisa de la mujer colombiana su compromiso de todas las horas tonifica el espíritu en el momento de las mayores dificultades *
Toda la oratoria de los promotores del gobierno omnipotente no puede anular el hecho de que hay sólo un sistema que resulta en una paz duradera: una economía de libre mercado. El control gubernamental conduce al nacionalismo y, por tanto, produce conflictos
El objetivo de la oratoria no solo en la verdad, sino la persuasión.
Si soy la lengua sucia tu eres la palabra debil, si soy la causa de tu rabia en esta labia fértil
Para decir la verdad, poca elocuencia basta.
Las lágrimas transmiten con mayor elocuencia que mil estrofas juntas, un mensaje de dolor indecible, de profundo arrepentimiento o de amor inefable.
En el fondo, la ideología tiene un poder de persuasión indiscutible. El discurso ideológico amenaza anestesiar nuestra mente, confundir la curiosidad, distorsionar la percepción de los hechos, de las cosas, de los acontecimientos
El librepensador puede ser definido como el rechazo de la autoridad en materia de opinión. Se establece la persuasión de la práctica, contra la coerción de la fuerza. Un librepensador es una persona que forma sus propias opiniones sobre los hechos como él los ve. Bien o mal, sus opiniones son suyas. Es una voz, no un eco.
No hay tal cosa como la violencia sin sentido. Ciudad de Dios, ¿es eso violencia sin sentido? Es la realidad, es la vida real, tiene que ver con la condición humana. Estando involucrado en el cristianismo y el catolicismo cuando era muy joven, tienes esa inocencia, las enseñanzas de Cristo. En el fondo quieres pensar que la gente es realmente buena - pero la realidad objetiva supera eso.
Que avance la cultura intelectual, que las ciencias naturales progresen en mayor medida y profundidad, y que la mente humana se expanda tanto como le plazca. No superarán la cultura moral del cristianismo que se irradia de los Evangelios.
El teatro debe divertir, noblemente, pero nada más que divertir. Pretender hacer de él una escuela de moral es corromper a la vez la moral y el arte.
Una vez que te abandonas a una metáfora, Claudio, cosa que sucede muy rara vez, la sigues demasiado lejos. Sin duda recordarás las instrucciones de Atenodoro contra esas cosas. Bueno, llama gusano a Seyano y termina con eso. Y vuelve a tu estilo habitualmente sencillo.
Estamos tan de prisa siempre que nunca tenemos oportunidad de hablar. El resultado es la superficialidad, una monotonía que deja a la persona preguntando años después por lo que pasó, cuando todo se ha ido.
La oportunidad se presenta tarde y se marcha pronto
Hasta en una declaración de guerra deben observarse las reglas de urbanidad.
La declaración de tregua de ETA era una declaración consensuada entre el Gobierno y la banda
El verbo brota del sueño como una flor o como un vaso lleno de formas y de humos.
Entre las marcas y las palabras no existe la diferencia de la observación y la autoridad aceptada, o de lo verificable y la tradición. Por doquier existe un mismo juego, el del signo y lo similar y por ello la naturaleza y el verbo pueden entrecruzarse infinitamente, formando, para quien sabe leer, un gran texto único.
La doctrina vincula los individuos a ciertos tipos de enunciación y como consecuencia les prohíbe cualquier otro; pero se sirve, en reciprocidad, de ciertos tipos de enunciación para vincular a los individuos entre ellos, y diferenciarlos por ello mismo de los otros restantes.
Escribir es ante todo poner de manifiesto la intensidad con que uno vive un problema o un concepto. La intensidad de la enunciación nos da pruebas de la veracidad de la preocupación. Creo que no se trata de escribir sobre nada sino desde todo.