(La muerte) ha sido siempre para mi una compañera tan fiel, que a veces lamento morirme solamente porque entonces tal vez la muerte me abandone.
Creo que el espíritu amateur, el amor hacia la tarea, es lo único que vuelve satisfactorio el tránsito por el trabajo; cuando observo de qué manera son descriptos hacia el público las celebridades, los ídolos, lamento muchísimo que se jerarquicen esos tipos de cosas, que se los describan millonarios, que se los describan famosos, que se los describan extraídos de la realidad social, fuera del contacto con la gente común.
Aquí todos han venido a vender su libro, sí, sí, a vender su libro... a echar la llorada