¡No me importan los motivos económicos ni las finalidades utilitarias! Pero. ¡Oh....SI...¡ La blanca altivez de las montañas, que invaden el horizonte bajo un azul absorto y sin arrugas.
La cabellera es para nosotras las mujeres un medio de expresión, no es cierto que con una negra cabellera la mujer demuestra su altivez o su desdén
Pronto cansa la altanería de una mujer hermosa; nunca aburre la de una mujer buena.
La peor arrogancia es la arrogancia producto de la ignorancia
El té carece de la arrogancia del vino, del individualismo consciente del café, de la inocencia sonriente del cacao
Yo no dudo, los soldados no dudan. La duda es una jactancia de los intelectuales
Hombre que vais por el mundo: atended y entended. El tiempo de la confusión es ya en ustedes. Aún resta un tiempo... Comprende, observad, entended. Ya la gente cayó en la imitación pueril, en el vulgar inicuo, en la jactancia banal, en la ignorada desvergüenza; desubicada corre tras el oro por él robará, estafará, la ganará, en bien o mal hasta él... ¡Basta! El oro en castigo: ¡caerá!
El instinto es un consejero leal; en tanto que la pedantería es un aire mefítico que ahoga los buenos sentimientos
La ciencia que sirve para hacernos orgullosos y que degenera en pedantería no vale mas que para deshonrarnos.
La presunción de inocencia también rige para aquellos que no son Urdangarín ni Teddy Bautista
La presunción de inocencia significa sólo que no vas directo al calabozo.
El motivo de la lucha nunca lo comprendí pero aprendí a aceptarla, aceptarla con orgullo porque no se cuentan los muertos cuando Dios está de tu lado.
Nadie podrá decir el día de mañana que los argentinos no supimos cumplir con nuestros deberes de patriotas y revolucionarios. Las nuevas generaciones, por cuya felicidad daremos todo de nosotros, recordaran con orgullo a sus mayores, como nosotros recordamos a los patriotas que fundaron la patria
La modestia contribuye al progreso, y el engreimiento conduce al atraso.
La tierra, por la magnificencia de sus horizontes, las frescuras de sus bosques y la pureza de sus fuentes, ha sido y continúa siendo la gran educadora y no ha cesado de llamar a las naciones a la armonía y a la conquista de la libertad.
Esa marometa que da el chiquillo en el aire expresa en un solo acto toda la alegría y la magnificencia de vivir.
Me aparto de la gente que considera a la insolencia valor, y cobardía a la ternura. Y también me aparto de aquellos que consideran charlatanería a la sabiduría e ignorancia al silencio
La insolencia es el escudo de la desvergüenza y la fortaleza de la cobardía
Imagínate tú que hace siglos que has muerto. No te preguntan las cosas, si pasas, quién eres. Procura un instante pensar que tus brazos no pesan. Son nada más que dos cañas, dos gotas de lluvia, dos humos calientes.
El aeronavego astral que habitó la Tierra en la civilización caldea trajo entonces naves con formas de gigantescos peces rojos y las usó para portar humanos seres al planeta Ki En Ki. Hoy de nuevo traerá sus gigantes naves rojas para igual salvar de los tres humos a los seres terrenos y por tales al Ki En Ki. ¡Les regresará en el año 2000!
A menudo el ser amado no es el que desencadena el imperio lentamente acumulado en el corazón del que ama. El amor es una cosa solitaria. Este descubrimiento es el que hace sufrir.
Es un gran error suponer, que el imperio que se establece sobre los hombres por la fuerza, sea más agradable y permanente, que el que se funda sobre el amor.
Es necesario que tu película despegue. La hinchazón y lo pintoresco le impiden levantar el vuelo.
No me parece que la luciérnaga extraiga mayor suficiencia del hecho incontrovertible de que es una de las maravillas más fenomenales de este circo, y sin embargo basta suponerle una conciencia para comprender que cada vez que se le encandila la barriguita el bicho de luz debe sentir como una cosquilla de privilegio
Si fueramos una partida de pedantes que contempláramos el mundo desde la atalaya de la suficiencia y de la infabilidad, empleando siempre los mismos procedimientos de lucha y la misma táctica, sin preocuparnos de los cambios de situación, entonces no seríamos el Partido del proletariado.
Sonaba tan real, tan cercano. Sólo cuando desaprobaba mi conducta, como ahora, emergía el verdadero recuerdo de su voz, la textura aterciopelada y la entonación musical que la convertían en el más perfecto de los sonidos.
Cuando estuve encarcelado, comprendí otra cosa: que se puede tener a un solo hombre por todo auditorio y, a través de él, hablar a toda la humanidad. Sin gritar: en voz baja, con una entonación muy de charla, muy íntima.
¡Oh ruiseñor! Tú eres de ardiente corazón: tus notas nos penetran, nos penetran, tumultuosa, indómita armonía. Cantas como si el dios del vino te dictara un mensaje de sátira amorosa: una canción de burla y de desprecio a la sombra, al rocío y a la noche callada y a la ventura firme y a todos los amores que descansan en esos tranquilos bosquecillos.
El terrorismo nace del odio, se basa en el desprecio de la vida del hombre y es un auténtico crimen contra la humanidad.