La moderación presupone el placer; la abstinencia, no. Por eso hay más abstemios que moderados. J-780
Donde quiera que veáis la moderación sin tristeza, la concordia sin esclavitud, la abundancia sin profusión, decid confiadamente; es un ser venturoso el que aquí manda.
Por las venas de Cuba no corre sangre, sino fuego: melodioso fuego que derrite texturas y obstáculos, que impide la mesura y, muchas veces, la reflexión. Pero así somos, y ése es nuestro mayor encanto y defecto: estamos hechos de música.
Ni pueblos ni hombres han de ser medrosos que lleguen a tener miedo de sí mismos. En buena hora que la política sea artística, y pocas ciencias requieren tanto arte y mesura y estudio y buen gusto como ella. Pero ha de ser sincera.
Pero ¿Qué es una doncella, con su deseo bobo, ignorante, comparada con una viuda, cuya ansiedad está formada por el conocimiento y la ausencia, la contención y la penuria, el hambre y el ayuno, lúcida y atrevida en su deseo?
En la contención es donde primero se muestra el Maestro.
Demasiado libertinaje en la juventud seca el corazón, y demasiada continencia atasca el espíritu.
La masturbación no mitiga la nocividad de la continencia más que en una muy escasa proporción
Obviamente, la compostura de un programa, la da la voz que sale al aire: de un locutor, animador, comentarista, periodista, etc. Esta voz no necesariamente tiene que destacarse por ser microfónica, sino por ser lo suficientemente clara, con buena tonalidad, animada y con buen ritmo
Se supone que soy el soldado que nunca pierde la compostura aunque soporte todo el peso del mundo en mis hombros.
Es cierto que todo ser humano necesita diversiones, sobre todo para sobrellevar el tedio de la vida de provincias. Por ello deben dedicarse a entretenimientos de naturaleza intelectual tales como la pesca, la lectura de obras literarias, la composición de haikus o la escritura de poemas modernos...
Un borde, en términos de dibujo, es el lugar donde se encuentran dos cosas. (...) Este concepto de los bordes es fundamental en el arte, y tiene que ver con la unidad, que es, quizás el principio artístico más importante. La unidad se consigue cuando todas las partes de la composición encajan en un todo coherente, y cada parte contribuye a la totalidad de la imagen.
Ni lo uno ni lo otro. Toda la obra de Costa está impregnada de un verdadero culto a la libertad. Y esto es a mi juicio más auténticamente representativo de la personalidad de Costa que unas cuantas frases pronunciadas o escritas las más de las veces a propósito de temas de los que provocaban con mayor agudeza su falta de ponderación y mesura, no tanto en las ideas como en las palabras.
Sin consideración, sin piedad, sin recato grandes y altas murallas en torno mío construyeron. Y ahora estoy aquí y me desespero. Otra cosa no pienso: mi espíritu devora este destino; porque afuera muchas cosas tenia yo que hacer.
Y con respecto a las multitudes, ¿no consiste la templanza principalmente en obedecer a los que mandan y mandar ellos, en cambio, en sus apetitos de comida, bebida y placeres amorosos?
Es un hombre elocuente el que puede tratar los temas de carácter humilde con delicadeza; las cosas grandes, de manera impresionante, y las cosas moderadas, con templanza
El respeto mutuo implica la discreción y la reserva hasta en la ternura, y el cuidado de salvaguardar la mayor parte posible de libertad de aquellos con quienes se convive.
Una onza de discreción vale por una libra de ingenio.
Agradece al tiempo que, mucho más sabio que tú, no apresure tus horas de dolor ni se demore en tus momentos de dicha, sino que te los mida con la misma igualdad, con la misma ecuanimidad generosa.
Nada debe turbar la ecuanimidad del ánimo; hasta nuestra pasión, hasta nuestros arrebatos deben ser medidos y ponderados.
El objeto de la educación es formar seres aptos para gobernarse a sí mismos, y no para ser gobernados por los demás.
Cualquier ciudadano que intenta derribar la ley, suprimir la libertad o someter a otros seres humanos a actos que nada tienen de humanos insulta a sus tradiciones, ignora su educación y traiciona sus obligaciones.
La buena educación es el germen de muchas virtudes
Una buena educación es el manantial y la raiz de una vida virtuosa.
Los que padecen perturbaciones mentales no aplican el principio de parsimonia Científica: la teoría más simple para explicar un cierto conjunto de datos. Prefieren el barroquismo.
No queremos una prudencia que nos lleve a la omisión, y nos haga imposible la cárcel. La terrible prudencia de acallar los gritos de los hambrientos y los oprimidos.
Nos estamos ahogando en información, mientras hambriento de sabiduría. El mundo a partir de ahora estará a cargo de los sintetizadores, personas capaces de reunir la información adecuada en el momento adecuado, pensar críticamente sobre ella, y tomar las decisiones importantes con prudencia
La frugalidad compromete todas las demás virtudes.
Guatemala tiene un río pensativo y otro que se tiñó de sangre... Tiene un volcán de agua, otro de fuego y una montaña de huesos y cadáveres.
Colocó la bola con tino de apache marihuano.
Desafortunadamente, el equilibrio de la naturaleza estipula que la super-abundancia de sueños se paga con el aumento de las pesadillas.
Sé que mi nacimiento es una casualidad, un accidente risible, y, no obstante, apenas me descuido me comporta como si se tratara de un acontecimiento capital, indispensable para la marcha y el equilibrio del mundo.
... es un tópico manoseado que nada se puede expresar con tal corrección que no se lo pueda viciar interpretándose mal.
El consenso de todos sirve como prueba de la corrección de sus ideas
Tu pie, decoro del marfil más puro.
Lo que libera a la metáfora, al símbolo, al emblema de la manía poética, lo que manifiesta la fuerza de la subversión, es el disparate, ese atolondramiento que Fourier supo poner en sus ejemplos, desdeñando todo decoro retórico. El porvenir lógico de la metáfora sería pues el gag.
Cuando se es joven, se crea. Cuando se es inteligente, se produce. No se adapta, se innova: la medianía copia; la originalidad se atreve.
No se puede gobernar a base de impulsos de una voluntad caprichosa, sino con sujeción a las leyes. No se pueden improvisar fortunas, ni entregarse al ocio y a la disipación, sino consagrarse asiduamente al trabajo, disponiéndose a vivir, en la honrada medianía que proporciona la retribución que la ley les señala
La propiedad del Estado no es la de todo el pueblo más que en la medida en que desaparecen los privilegios y las distinciones sociales y en que, en consecuencia, el Estado pierde su razón de ser. Dicho de otra manera: la propiedad del Estado se hace socialista a medida que deja de ser propiedad del Estado.
Estar contigo o no estar contigo es la medida de mi tiempo