La desgracia de los hombres proviene siempre de que colocan mal su precaución y su confianza.
En la calle como en el sexo andar con precaución
El objeto del castigo es la prevención del mal; nunca impulsará a nadie al bien.
La prevención de accidentes no debe ser considerada como una cuestión de legislación, sino como un deber ante los seres humanos, y como una razón de sentido económico.
La web es más una creación social que técnica. La diseñé para un efecto social —para ayudar a las personas que trabajan juntas— y no como un juguete técnico. El objetivo último de la web es apoyar y mejorar nuestra existencia en la telaraña mundial. Nos agrupamos en familias, asociaciones y empresas. Desarrollamos la confianza a grandes distancias, y la desconfianza a la vuelta de la esquina
La desconfianza es madre de la seguridad
Si hay algo que ennoblezca a la juventud, es el miramiento y el respeto a los ancianos.
Escribo: eso es todo. Escribo conforme voy viviendo. Escribo como parte de mi economía natural. Después, las cuartillas se clasifican en libros, imponiéndoles un orden objetivo, impersonal, artístico, o sea artificial. Pero el trabajo mana de mí en un flujo no diferenciado y continuo.
Más vale maña que fuerza.
Vigilaré con la astucia de la serpiente, y con su veneno te morderé. ¡Mortal!, te arrepentirás del daño que me has hecho.
El pueblo aprendió que estaba solo... El pueblo aprendió que estaba solo y que debía pelear por sí mismo y que de su propia entraña sacaría los medios, el silencio, la astucia y la fuerza.
Esta es la más refinada sutileza del sistema: inducir conscientemente a la inconsciencia, y luego hacerse inconsciente para no reconocer que se había generado un acto de autosugestión.
Hay dos maneras de ser sublimes: a través de las ideas o a través de los sentimientos. En el segundo caso, poseemos palabras de fuego que penetran y que arrastran. En el primero, sólo poseemos palabras de luz que calientan poco, pero que cautivan. La extrema sutileza puede hallarse en las ideas, pero no debe hallarse en el razonamiento.
Un poco de disimulo es el único vínculo sólido entre los hombres.
La falsedad y el disimulo son útiles dentro de la vida social. Yo esta condición no la he tenido, y creo que el no tenerla me ha perjudicado más que otra cosa. También me ha perjudicado un poco, al tratar con propios y extraños, el no tener solemnidad.
La vigilancia y la lucidez son los senderos de la inmortalidad. Los que vigilan no mueren. La negligencia es el sendero de la muerte. Los negligentes son como si ya estuvieran muertos.
Lo característico de la conciencia es la inquietud, la vigilancia constante, la perenne disposición a la defensa. Ser es defenderse.
Por lo demás, no me han llamado la atención muchas cosas más: son sólo relatos inventados, y a mí no me gustan las ficciones.
Yo no escribo para el orgulloso aparte de la luna que está bramando en estas páginas de rocío marino ni para los muertos imponentes con sus ruiseñores y salmos sino para los amantes, cuyos brazos rodean las penas de todos los tiempos, quienes no me pagan con alabanzas ni monedas ni prestan atención a mi oficio o arte.
Sentencias latinas, dichos históricos, versos célebres, máximas jurídicas, máximas, es de buen aviso llevarlas contigo para los discursos de sobremesa, de felicitación o de agradecimiento.
Cuando los hombres inventan irse de repente, cuando pasan sin aviso de la adoración al desapego, es cuando ven a su mujer más crecida de lo que soportan.
La crianza y el buen comedimiento más honra al que la hace que no al que se le hace.
Sin consideración, sin piedad, sin recato grandes y altas murallas en torno mío construyeron. Y ahora estoy aquí y me desespero. Otra cosa no pienso: mi espíritu devora este destino; porque afuera muchas cosas tenia yo que hacer.
Cristiano Ronaldo nunca alcanzará el nivel que pretende alcanzar si no acepta los hechos. Un futbolista que quiere ser el mejor del mundo, y que tal vez lo sea ya, debería tener la suficiente madurez para comprender que contra estos hechos no hay argumentos. Esto ni siquiera es un juego de palabras entre él y yo.
La madurez del hombre es haber vuelto a encontrar la seriedad con que jugaba cuando era niño.