La violencia no es el remedio, tenemos que hacer frente al odio con el amor.
Yo no he sufrido ninguna ofensa personal, ni por el rey ni por el gobierno actual. No siento odio hacia Humberto de Saboya, pero odio á todos los reyes, porque ellos impiden la realización de mi ideal, la República universal.
En realidad no soy tanto un banquero como un estudioso de la malevolencia cósmica.
La pasión ante la malevolencia y la estupidez se apaga.