No creo que volvamos al podio en el 2007 Es mejor empezar enseguida con el automóvil para el 2008 que perder tiempo tratando de arreglar un coche que ya nació mal Renault tiene algo malo o defectuoso
Ganar el campeonato sería increíble, un grandísimo sueño. No quiero ni pensar en la posibilidad de perder la final: sería un desastre, una catástrofe
Sofía.- El cerdo no quiere morir por miedo a no ser cerdo, al caballo le asusta sobre todo el dejar de ser caballo.
Cambias el curso de mis cosas cada día y enseñas a mis ojos a ver, precisamente estar cerca de ti me resulta una cosa natural y no podría dejar que te fueras, no importa lo que suceda porque te amo más que nunca, ahora que el pasado se ha ido.
Me has hecho confesar los miedos que siento. Pero te voy a decir ahora cuáles son las cosas que no me dan miedo. No me da miedo de estar solo, ni de ser pospuesto a otro, ni de abandonar lo que tenga que abandonar, sea lo que sea. No me da miedo el cometer un error, aunque sea un error de importancia, un error de por vida, tan largo tal vez como la misma eternidad.
Cuanto más grande es el trabajo y mayor el desafío más maravilloso creen que es. Sería bueno abandonar esta forma de pensamiento y vivir una vida fácil, confortable, con mucho tiempo libre. Yo creo que ésta es la vida de los animales en los trópicos, saliendo por la mañana y el anochecer para ver si hay algo que comer, y tomando una larga siesta por la tarde; debe ser una vida maravillosa.
Aconsejar a otros, y desatender su propia seguridad, es insensato.
Las personas exitosas aprenden a sobreponerse a sus miedos en lugar de dejar que sus miedos manejen su vida.
El día que se nace uno se empieza un poco a morir. Estamos acostumbrados a ver la muerte como algo negativo, y yo estoy tan cerca que no puedo dejar de pensar en este asunto. pero pienso con alegría vital. Lo que no nos enseñan es que el día que se nace se empieza uno a morir, y la muerte nos acompaña cada día
Se me ha nombrado presidente de la Unión Cívica, y podéis estar seguros que no he de omitir ni fatigas, ni esfuerzos, ni sacrificios, ni responsabilidades de ningún género para responder a la patriótica misión que se me ha confiado.
Además, cuando nosotros concluimos que Dios no ha podido dejar de hacer aquello que ha hecho, lo deducimos de su perfección, porque en Dios sería una imperfección el poder omitir lo que hace.
La teología es el pensamiento aplicado a la religión; y los que prefieren una religión sin pensamiento no tienen por qué desdeñar a los que tienen gustos más racionalistas
Nuestro gran error es intentar obtener de cada uno en particular las virtudes que no tiene, y desdeñar el cultivo de las que posee
Defender o negar nuestro defectos cuando se nos reprenden, es aumentarlos.
La educación para la libertad debe comenzar exponiendo hechos y anunciando valores y debe continuar creando adecuadas técnicas para la realización de los valores y para combatir a quienes deciden desconocer los hechos y negar los valores por una razón cualquiera.
Su experiencia, como tantas veces sucede, le hizo desconocer la verdad.
Quien observa lo hace desde un cierto punto de vista, lo que no sitúa al observador en el error. El error en verdad no es tener un cierto punto de vista, sino hacerlo absoluto y desconocer que aun desde el acierto de su punto de vista es posible que la razón ética no esté siempre con él.
No se llega a ser verdaderamente un gran hombre si no se tiene el valor de ignorar una infinidad de cosas inútiles.
Y en ese momento -susurró-, pronunciaste mi nombre en sueños. Lo dijiste con tal claridad que por un momento creí que te habías despertado, pero te diste la vuelta, inquieta, musitaste mi nombre otra vez y suspiraste. Un sentimiento desconcertante y asombroso recorrió mi cuerpo. Y supe que no te podía ignorar por más tiempo.
El hombre que ha perdido la aptitud de borrar sus odios esta viejo, irreparablemente
Yo mismo, sin ir más lejos, acababa de desaparecer. Un sentimiento de bienestar por haberme sabido borrar del mundo comenzó a invadirme y acabé sintiéndome, allí en la catedral vacía, igual que un día me había sentido en lo alto de la torre de Montaigne, rodeado por la soledad, el silencio, la locura, la libertad. Y por la bella infelicidad, otro de esos abismos.
Porque aunque parezca que el cine es el lenguaje por excelencia para sugerir, el lenguaje de los sueños, de lo irracional, para nada, el cine es muy muy objetivo: hay cosas que en una novela puedes pasar por alto pero que en la película tienes que mostrar
Tampoco podemos pasar por alto la probabilidad de que la inculcación constante de una creencia en Dios en la mente de los niños produzca un efecto tan fuerte, y quizás heredado, en sus cerebros no totalmente desarrollados, que les resulte tan difícil librarse de su creencia en Dios, como a un mono de su miedo y aversión instintivos a una serpiente