Sólo los buenos sentimentos pueden unirnos; el interés jamás ha forjado uniones duraderas
En virtud de la ideología de la industria cultural, el conformismo sustituye a la autonomía y a la conciencia; jamas el orden que surge de esto es confrontado con lo que pretende ser, o con los interes reales de los hombres.
Las corrientes, las cascadas y los saltos, son los grandes fenómenos de la vida del arroyo. No siendo todavía bastante fuerte para regularizar completamente la inclinación de su lecho, y minar las bases de la roca, arrasar los salientes de la piedra y reducir a polvo los cantos esparcidos, tiene el arroyo que salvar estos obstáculos saltando por encima o escaparse por los lados.
...la propensión habitual de la humanidad hacia lo maravilloso, y que aunque esta inclinación pueda, en ciertos intervalos, ser frenada por el saber y por sentido común, no puede radicalmente extirparse de la naturaleza humana.
No me caigo bien a mí mismo, dijo alguien para explicar su propensión a la sociedad. El estómago de la sociedad es más sólido que el mío, me aguanta.
La vanidad es la ciega propensión a considerarse como individuo no siéndolo.
Es de rigurosa justicia emancipar la Enseñanza de todo extraño poder, y convertirla en una función social, sin otra ley que la libre indagación y profesión de la verdad
Un sutil pensamiento erróneo puede dar lugar a una indagación fructífera que revela verdades de gran valor.
No hay enseñanza sin investigación ni investigación sin enseñanza.
Si la política es el arte de lo posible, la investigación es sin duda el arte de lo soluble. Ambas son asuntos de mentalidad inmensamente práctica
En la teoría clásica de la relatividad general el principio del universo tiene que ser una singularidad de densidad y curvatura del espacio-tiempo infinitas. En esas circunstancias dejarían de regir todas las leyes conocidas de la física.
Por fiel que uno quiera ser, nunca deja de traicionar la singularidad del otro a quien se dirige.
La originalidad no consiste en decir cosas nuevas, sino en decirlas como si no hubiesen sido dichas por otro.
Ciertas creencias que no percibimos no por ello son asimilables a un puro vacío, como no lo es el aire que nos envuelve; componen a nuestro alrededor una atmósfera variable, a veces excelente, a menudo irrespirable, y merecerían ser anotadas con tanto cuidado como la temperatura, la presión barométrica o la estación, pues nuestros días tienen su originalidad física y moral.
El aseo del vizcaíno es proverbial ; el español apenas se lava una vez en su vida y se muda una vez al año. Oíd hablar a un vizcaíno, y escucharéis la más eufórica, moral y culta de las lenguas; oídle a un español, y si sólo le oís rebuznar, podéis estar satisfechos, pues el asno no profiere voces indecentes ni blasfemias.
La verdadera bondad del hombre sólo puede manifestarse con absoluta limpieza y libertad en relación con quien no representa fuerza alguna.
Es una cuestión de disciplina, me decía más tarde el principito. Cuando por la mañana uno termina de arreglarse, hay que hacer cuidadosamente la limpieza del planeta
Corrupción política: Odio la pulcritud porque me suena a negación. Te gusta eliminar la evidencia. Pero a mí me gusta lo evidente. Me gusta ver las cosas como son... Nada tengo contra el olor de la podredumbre pero si mucho contra aquello que simimula el hedor de lo podrido en los Estados Unidos de America.
No hablará mi lengua ni escribirá mi mano sino para examinar y buscar la Intimidad en mis vivencias. Gran respeto a los demás en las suyas, y ayudarles a entenderlas. Todo el amor y esmero que ponga ahí será poco.
El militar es una planta a la que hay que cuidar con esmero para que no dé sus frutos.
Uno puede ser llamado en cualquier momento a librar una dura batalla; si se muere habiendo descuidado su pulcritud, se da muestra de una relajación general de las buenas costumbres y uno se expone al desprecio y al descuido del adversario. Esta es la razón por la cual los viejos y jóvenes Samuráis han aportado siempre un gran cuidado en su presentación.
Cerrad vuestros corazones con más cuidado que vuestras puertas.
Todos llevamos al cuello el yugo de la monotonía, todos esperamos algo, el diablo sabrá qué... Sí, todos esperamos. Más confusamente unos que otros, pero la expectativa es de todos. El común de las personas...
Hay períodos de la historia, como el que atravesamos, donde las expectativa de cambio retroceden a zonas pantanosas. Pero la misma historia demuestra que hay flujos y reflujos y que la expectativa vuelve. Todo esto tiene que ver con la utopía. La utopía jamás se cumple, fracasa, pero deja una renovación y la idea imperiosa de retomarla.
Un buen libro es aquel que se abre con expectación y se cierra con provecho
Es un buen libro aquel que se abre con expectación y se cierra con provecho