Y dicen que pienso en lo escasamente saludable que a la larga fue publicar libros y haberlo hecho en gran parte para tener cierta fama y luego poder administrarla como un buen burgués y acabar diciendo banalidades en periódicos y revistas, incapaz de ser el dueño de la más pequeña partícula de terreno de índole privado, personal. Escribir para esto.
La muerte abre la puerta de la fama y cierra tras de sí la de la envidia.
Una celebridad es una persona que se ha pasado toda la vida tratando de llegar a famoso y cuando lo ha conseguido utiliza gafas negras para que nadie le reconozca
Ser actor de teatro significa ser conocido. Tienes que ser una estrella de cine para ser una celebridad
Ramón ya estaba perdido para la causa de la renovación desde un orden y sorprendía que militares de prestigio como Queipo de Llano secundaran sus veleidades republicanas, a sus años, con la misma ligereza que utilizaría para hacerse filocomunista un 'señorito aviador' como Hidalgo de Cisneros.
Frívola con arte y graciosa cual una muñeca, sin sensibilidad, su existencia entera la consagraba a mantener el prestigio de estar de moda, deslumbrando por el gusto artístico y exótico de sus vestidos.
Reconozco que la popularidad se la debo a la tele pero la verdad es que mi desprestigio lo conseguí en el cine
La popularidad es la gloria en calderilla
La autoestima es la reputación que adquirimos de nostros mismos
Una mala reputación es una carga, ligera de levantar, pesada de llevar, difícil de descargar.
No prestéis crédito a nadie, ni a mí mismo, a no ser que las enseñanzas estén corroboradas por razones y argumentos sólidos.
Cuando se ama de verdad -decían nuestros antiguos trovadores-, se oiga lo que se oiga, se vea lo que se vea en contra de la amada, no se debe dar crédito ni a los oídos ni a los ojos; hay que escuchar únicamente al corazón.
Michael (Schumacher) es el piloto con más sanciones y más antideportivo de la historia de la F-1. Eso no quita que haya sido el mejor a a la hora de pilotar y luchar contra él ha sido un honor y un placer. A cada uno le llega su hora. Hay que respetar su decisión. Se va a ganar en igualdad
Al rey, la hacienda y la vida se ha de dar; pero el honor es patrimonio del alma y el alma sólo es de Dios
En ciencia el reconocimiento se concede al hombre que convence al mundo, no a aquel a quien se le ocurre la idea.
El miedo a envejecer nace del reconocimiento de que uno no está viviendo la vida que desea. Es equivalente a la sensación de estar usando mal el presente
Que otra cosa fue, en concepto de los hombre imparciales del país y en opinión del universo entero, sino un furioso brote comunista largamente planeado desde lejanas capitales marxistas y para cuya ejecución vinieron al país revolucionarios extranjeros de universal nombradía
Lo que distingue la pintura al óleo de cualquier otra forma de pintura es su especial pericia para presentar la tangibilidad, la textura, el lustre y la solidez de lo descrito. Define lo real como aquello que uno podría tener entre las manos.
El oro que se adquiere sin trabajo no hace más que dar lustre a la miseria del que lo posee.
Hay pocos bípedos, después de Adán, que hayan merecido el apelativo de hombres
Cual si la Tierra fuera un cráter, vomitó del fondo de sus entrañas un ingente chorro de fuego. El suelo se elevó y fueron muy contados los espectadores que pudieron entrever, por un instante, el gigantesco proyectil, hendiendo victorioso los aires, en medio de una aureola de flamígeros vapores.
El gobernante es, por lo común -salvo aquellos excepcionalísimos que aparecen nimbados por la aureola de la historia y que son en número muy reducido-, un hombre débil, entregado al oleaje de las pasiones populares, y muchas veces sin fortaleza para empuñar firmemente la caña del timón y conducir la nave al puerto de salvación.
Quítate el cartel y apuesto a que antes de seis meses... ¿Qué cartel? Ese que llevas en la cara: Soy viuda para siempre, no existo para la vida y para el casamiento. Decídete, vuelve a reír, a ser igual a todo el mundo y te juro que en menos de seis meses...
Caminamos. Puertas que se abrían y se cerraban. Continuábamos caminando entre las alambradas electrificadas. A cada paso, un cartel blanco con un cráneo negro que nos miraba. Una inscripción: ¡ATENCIÓN! PELIGRO DE MUERTE. Qué burla: ¿Había aquí un solo sitio en que no se estuviera en peligro de muerte?
Sé que aguantarán a estas altas horas de la noche el momento de publicidad ya que al regreso tenemos un especial del salón del cine erótico de Barcelona...
Cuando vuelvan de la publicidad me habré desnudado y me tiraré al mar.
El éxito empresarial no se basa en predicciones grandilocuentes; es el resultado de la capacidad para responder rápidamente a cambios reales a medida que éstos tienen lugar.
Una película de éxito es aquella que consigue llevar a cabo una idea original.
Hay pocos bípedos, después de Adán, que hayan merecido el apelativo de hombres