Es mas maduro simular afecto que amenazar con un revolver sin balas.
Todo acto es un disparo de revólver cerebral.
Me es posible mezclar mi aliento al suyo, embriagarme en la contemplación de sus facciones sin que me considere sospechosa de impureza y engaño. Teme que mi seducción le haga violar sus votos. ¡Qué injusto es! Si quisiera excitar su deseo, ¿Le ocultaría con tanto cuidado mis facciones? Esas facciones de las cuales a diario le oigo decir...Se interrumpió y se sumió en sus reflexiones.
Quiero mezclar mi duelo con el duelo de la naturaleza.
Cuando asiento mis pies en tierra firme no me los hace menear ni un terremoto.
Cual campo que presenta la batalla a otro enemigo campo armado y fiero, o cual el que a batir va la muralla del que en el campo le huyó primero así, vestidos de menuda malla, contra uno solo sale un pueblo entero, y aunque no al son de cajas alistados, en orden salen por la puerta armados.
Dios se vale muchas veces de los débiles para batir a los poderosos.
A veces la mudanza del nombre de los objetos basta para mudar los sentimientos de los hombres. Los romanos aborrecían el nombre de rey, y toleraron los de dictador y emperador.
Porque así como a la ciudad que tiene quietud y seguridad, le conviene no mudar las leyes y costumbres antiguas, así también a la ciudad que es apremiada y maltratada de otras, le cumple inventar e imaginar cosas nuevas para defenderse; y ésta es la causa porque los atenienses, a causa de la mucha experiencia que tienen, procuran siempre novedades.
Voy a pasar por la vida, ya sea en primera o tercera clase, pero nunca en segunda.
Uno debe trabajar seriamente y debe ser independiente y no pasar la vida simplemente divirtiéndose; eso es lo que nuestra madre,, nos dijo siempre, pero nunca que la ciencia era la única carrera que merecía la pena seguir
Al estar determinados por costumbre a trasladar el pasado al futuro en todas nuestras inferencias, cuando el pasado ha sido absolutamente y regular y unifome, esperamos el acontecimiento con la máxima seguridad y no dejamos lugar para la suposición contraria.
El jugador de ajedrez debe trasladar sus capacidades intelectuales a otras artes como las letras y la filosofía, ya que realiza muchas más combinaciones que casi todos los autores literarios
Pero tampoco los mismos reyes advertían suficientemente qué precedente introducían en contra de sí mismos: que en lo sucesivo estuviera permitido a un sacerdote romano deponer de su trono a aquel príncipe que hubiera incurrido en su odio.
Pero los años me han enseñado que no se convence más que a los convencidos. Pretender apartar a las gentes de sus gustos, de sus inclinaciones naturales, para acercarlas a nosotros, es tan estéril como renegar de nosotros mismos para borrar la distancia que nos separa de tal o cual ser.
El hombre, tanto físico como moral, ser viviente, sensible, pensante y actuante, no tiende en cada instante de su vida más que a procurarse lo que le gusta o lo que está conforme con su ser, y se esfuerza por apartar de sí todo lo que le puede dañar.
Todo ocurre siempre porque sí, y de la manera que tiene que ocurrir, de la manera que puede ocurrir, ésa es la verdad. No vale la pena indagar los detalles, cuando ya todo ha terminado. Pero en lo esencial, en lo verdadero, sí que vale la pena indagar, porque si no, ¿Para qué he vivido? ¿Para qué he estado soportando estos cuarenta y un años? ¿Para qué te he estado esperando?
Evita indagar lo que será el mañana.
El pueblo es soberano y él sabrá investigar las operaciones de sus representantes
La manera de ser moral es aprender que es lo que causa daño y como evitarlo. Esto significa investigar la naturaleza, especialmente la naturaleza humana: quienes somos, que necesitamos, donde vivimos, como funcionamos, y porque nos comportamos de la manera que lo hacemos.
Este necio pretende trastornar toda la ciencia de la astronomía
Todas las cosas por un poder inmortal cerca o lejos ocultamente están unidas entre si, de tal modo que no puedes agitar una flor sin trastornar una estrella
Muy gran valor es vencer a los enemigos con armas, pero cosa de mayor prudencia desterrar y ahuyentar los vicios de la paz.
Propongamos sin miedo una gran asamblea donde allí se proclame que la gente se ame contra viento y marea, desterrar la codicia, tirar la injusticia desde una azotea y colgar un letrero que diga te quiero y todos lo vean.