Odiar es un despilfarro del corazón, y el corazón es nuestro mayor tesoro.
Odiar es un despilfarro de corazón, y el corazón es nuestro mayor tesoro.
No existía más que la dignidad ultrajada, la libertad perdida, la dilapidación entronizada, la esclavitud constituida.
Las pasiones engendran a menudo otras que son sus contrarias: la avaricia produce a veces la prodigalidad, y la prodigalidad la avaricia; a menudo somos firmes por ser débiles, y audaces por cobardía.
La peor prodigalidad es la del tiempo.
El ajedrez es el más grande desperdicio de la inteligencia humana después de la publicidad.
Desear ser otra persona es un desperdicio de la persona que eres
Virtud y sabor son casi lo mismo, porque la virtud es poco más que un gusto activo y el más delicado afecto de cada uno se combina en el amor verdadero. ¿Cómo es posible entonces que busquemos amor en las grandes ciudades, donde el egoísmo, la disipación y la insinceridad ocupan el lugar de la ternura, la sencillez y la verdad?
¿No es verdad que es mas honroso predicar la rigidez de Esparta que la libre disipación de Babilonia?
Estamos tan bien instalados en la abundancia que no es fácil convencer al vecino de que se sacrifique seriamente para impedir el calentamiento del planeta y hacerlo invisible para millones de personas
La paz y la abundancia engendran cobardes; la necesidad fue siempre madre de la audacia.
Para llegar a una vana pompa y a un poder prohibido, se había ennegrecido con mil crímenes, se ve presa de remordimientos y víctima de un dolor sin fin y sin límites.
Así era Venecia, la bella insinuante y sospechosa; ciudad encantada de un lado, y trampa para los extranjeros de otro, en cuyo aire pestilente brilló un día, como pompa y molicie, el arte, y que a los músicos prestaba sones que adormecían y enervaban.
El ideal es un primer motivo, un avance en el rumbo infinito, una esperanza intuyente. Náufraga en el torrente de la vida, la humanidad se incorpora, con la mirada en la altura, en el celaje alegre que engalana el deseo.
Un buen método de enseñanza no tanto se propone comunicar mucha ciencia al estudiante, cuanto dar a su entendimiento poderoso impulso y rumbo cierto