No hay testigo tan terrible ni acusador tan potente como la conciencia que mora en el seno de cada hombre.
Se prohíbe recompensar al delator y al traidor, por más que agrade la traición y aún cuando haya justos motivos para agradecer la delación.
Si se exime a las empresas del canon digital los particulares pagarán más
Sentado con mi guitarra frente al cañón de luz, descubrí que mi sombra, es la parte de mí que hasta la luz desprecia