Siempre quise ser actor, desde que tenía diez años. Y a los dieciséis ya me lo tomé totalmente en serio.
Yo realmente tenía un resentimiento... que todavía sale de vez en cuando.
El pueblo me conoce y no por verme en la tele
Tuve un novio que me dijo que nunca tendría éxito, que nunca me nominarían para un Grammy, que nunca tendría un hit, y que esperaba que fuese a fracasar. Yo le dije, Algún día, cuando ya no estemos juntos, no podrás pedir un café en ningún sitio sin oírme o verme
Una vez que te abandonas a una metáfora, Claudio, cosa que sucede muy rara vez, la sigues demasiado lejos. Sin duda recordarás las instrucciones de Atenodoro contra esas cosas. Bueno, llama gusano a Seyano y termina con eso. Y vuelve a tu estilo habitualmente sencillo.
Cuando el ser humano examina la religión desde un punto de vista crítico y en lugar de obediencia y temor ciego busca convicciones basadas en la razón, esa condición no puede mantenerse mucho tiempo. La contradicción interna es una sentencia de muerte para toda ética, un gusano que roe la energía del hombre
Para poder continuar subsistiendo como un parásito dentro de la nación, el judío necesita consagrarse a la tarea de negar su propia naturaleza intima
...A partir de ahora todas las cosas de la vida están ordenadas de tal modo que el sacerdote resulta indispensable en todas partes, en todos los acontecimientos naturales de la vida, en el nacimiento, el matrimonio, la enfermedad, la muerte, para no hablar del sacrificio (la cena), aparece el parásito sagrado para desnaturalizarlos: dicho en su lenguaje, para santificarlos...
Con su particular falta de falsa modestia, Juan me dijo una vez: Mi aspecto es una dura prueba para la gente. Si no empiezan a verme hermoso cuando aún tienen la posibilidad de aprender algo nuevo, sé que están interiormente muertos, y que son peligrosos.
Yo no soy Jesucristo García, a mí no vienen a verme los enfermos, a mi viene a verme la gente sana y yo los pongo a todos ciegos.