Ser débil es rehusar de ti mismo
No hay adversario pequeño. Nadie debe despreciar ningún adversario
Se ve que no conoces a las mujeres, son capaces de todo, de lo mejor y de lo peor si les da por ahí, son muy señoras de despreciar una corona a cambio de ir al río a lavarle la túnica al amante o de arrasarlo todo y a todos para sentarse en un trono.
Inventariar perpetuamente lo que se es Es, renegar constantemente de sí y refugiarse en una esfera en que no se es ya nada más que una pura y libre mirada
Ser un rebelde no es ser punk, ser un rebelde no es copiar a los gringos, ser rebelde no es vestirse de negro, ser rebelde es renegar de la televisión.
Dos extremos: excluir la razón y no admitir más que la razón.
Cuando una vida se vuelve impensable o cuando un pueblo entero se convierte en impensable, hacer la guerra resulta más fácil. Los marcos que presentan y sitúan en primer plano las vidas por las que es posible llevar duelo funcionan para excluir otras vidas como merecedoras del dolor.