Un corazón herido cae sumiso sobre una flor más bella que el paraíso, las nupcias de dos bocas, toda una vida que la llama invisible muere encendida.
El casamiento y el caldo pelando.
En un divorcio, no importa si el casamiento se acordó legalmente o no. La propiedad debe ser dividida de cualquier modo
Lo más razonable que se ha dicho sobre el matrimonio y sobre el celibato es esto: hagas lo que hagas te arrepentirás.
Un buen matrimonio sería aquél en que olvidaríamos de día que somos amantes y de noche que somos esposos.
Un corazón herido cae sumiso sobre una flor más bella que el paraíso, las nupcias de dos bocas, toda una vida que la llama invisible muere encendida.
Todo casamiento es un encuentro dramático entre la naturaleza y la cultura, entre la alianza y el parentesco.
En un divorcio, no importa si el casamiento se acordó legalmente o no. La propiedad debe ser dividida de cualquier modo
El matrimonio debe ser abierto a cualquier pareja de adultos que quieran entrar en ese contrato, sin fijarse en su orientación sexual. Es un asunto de igualdad de derechos civiles.
El matrimonio es la muerte de la esperanza.