Un buen matrimonio es el que permite un cambio y el crecimiento en las personas y en la forma de expresar su amor.
Un matrimonio exitoso es un edificio que se debe reconstruir diariamente.
Todo casamiento es un encuentro dramático entre la naturaleza y la cultura, entre la alianza y el parentesco.
El amor es un juego; el casamiento un negocio.
Tú, ave peregrina, arrogante esplendor -ya que no bello- del último occidente: penda el rugoso nácar de tu frente sobre el crespo zafiro de tu cuello, que himeneo a sus mesas te destina.
Sostengo, pues, que los mortales que no conocen el himeneo ni las dulzuras de la paternidad, son más felices que los que tienen hijos.
Un corazón herido cae sumiso sobre una flor más bella que el paraíso, las nupcias de dos bocas, toda una vida que la llama invisible muere encendida.