El pensamiento del maestro Fernando González nunca ha perdido actualidad, pero una sorda fatalidad histórica lo ha tenido confinado en un oscuro anonimato, en el que su semilla no muere pero tampoco ha fructificado con la fecundidad que merece. Ya es hora de que el país descubra a su descubridor
Raúl se ha inventado solo. Yo no soy su descubridor porque Raúl se descubre él solo. Él se inventó a sí mismo, es de otro planeta. Cuando Raúl toca la pelota el mundo se detiene. Su único rival es y será la historia
El caminante que sube a una montaña se vuelve dueño de sí mismo y responsable de su propia vida: no está sometido a los caprichos de los elementos como el navegante aventurero sobre los mares; menos aún como el viajero transportado en ferrocarril, simple carga humana facturada, etiquetada, controlada y expedida a hora fija bajo la vigilancia de un empleado uniformado.
Basta un poco de espíritu aventurero para estar siempre satisfechos, pues en esta vida, gracias a Dios, nada sucede como deseábamos, como suponíamos, ni como teníamos previsto.
La alternativa es inexorable: o soy viajero de las antiguas épocas, y me enfrento con un espectáculo prodigioso que me resultaría casi ininteligible o soy viajero de mi época, precipitándome en la búsqueda de una realidad desvanecida.
Si al franquear una montaña en la dirección de una estrella, el viajero se deja absorber demasiado por los problemas de la escalada, se arriesga a olvidar cual es la estrella que lo guía.
El comportamiento en la actualidad está dominado por los buscadores. Usted va a su buscador favorito, escribe lo que quiere buscar y la da al botón de buscar. Luego toman los primeros resultados y siguen los enlaces.
No es la posesión de la verdad, sino el éxito que llega luego de la búsqueda, donde el buscador se enriquece con ella.
Porque sólo tengo un mal barco me llaman pirata; y porque tú tienes una gran flota te llaman conquistador
Es raro el caso en que la conquista esté muy satisfecha del conquistador
La felicidad es algo que no se puede tener todo el tiempo porque seria demasiado aburrido. A veces se llega y se agarra, y es ahí donde hay que guardar para los tiempos extraños. Pero estoy en eso, soy un buscador de la felicidad, que es lo que te hace permanecer creativo y en la creatividad puedes ocuparte de algo positivo. Eso te hace sentir bien.
No es la posesión de la verdad, sino el éxito que llega luego de la búsqueda, donde el buscador se enriquece con ella.