Debemos ordenar el caos. Y no tengo duda de que el mejor y más veloz método es implantar la ley del pueblo en vez de la de la turba
Quien se controla a sí mismo y por el bien, no tendrá dificultad alguna para gobernar con eficacia. Al que no sabe gobernarse a sí mismo, le resultará imposible ordenar la conducta de los demás hombres.
Para una verdadera libertad, que es la anarquía, de existir, tiene que haber la posibilidad de elección, y que todo el mundo puede organizar su vida para adaptarse a ellos mismos, ya sea en líneas comunistas o individualistas, o cualquier mezcla de ambas.
Esta incomprensión lo hace reaccionario, pues los llamamamientos a la sociedad y al Estado, es decir, a los ideólogos y los políticos de la burguesía, sólo pueden desorientar a los socialistas y tomar por aliados a los peorers enemigos del proletariado, sólo pueden frenar la lucha de los obreros por la emancipación en lugar de contribuir a intensificar, esclarecer y organizar mejor esta lucha.
¡El honor! ¡Cómo es posible que otra persona pueda disponer de nuestro honor! ¿No será acaso esto del honor un medio que los hombres hayan empleado para encadenar a las mujeres más fuertemente a ellos?
En las argumentaciones utilizamos las palabras en lugar de las cosas porque no podemos disponer de las cosas mismas.
Ayer tuve el gran consuelo de distribuir en Medina de Rioseco (antes muy frío y con muchos rojos) 2.500 comuniones y más de 1.000 confirmaciones, el pueblo consta de 4.000 almas ¡que buen misionero es Fray Palo!
Si quieres construir un barco, no empieces por buscar madera, cortar tablas o distribuir el trabajo, sino que primero has de evocar en los hombres el anhelo de mar libre y ancho.
A mí lo que más me influye, como escritor, es la noción de montaje, el collage, el intentar articular un texto siguiendo técnicas que se acercan al cortar y pegar de la película.
Creo que desperdiciamos 80 días, porque proyectar es parte del éxito. Proyectar con acierto, contemplar con acierto, imaginar lo que va a suceder, y articular respuestas prestablecidas, es parte del éxito. Nosotros imaginamos una realidad que en este momento sería absurdo no reconocer que está desvirtuada, porque todos los días se agrega una dificultad diferente a lo que estamos llevando a cabo. Eso no quiere decir que no podamos intentar con muchísima ilusión y entusiasmo lo que esperan de nosotros. Lo que no podemos hacer es seguir ignorando la situación.
En el mundo de la música tienes que armar escándalos, ser exótico, etc. Mientras más pides, parece que seas más importante y a mí eso me parece una tontería porque lo que haces es poner en problemas al empresario que te está contratando.
Instruir al cerebro es hacer efectivo el golpe del brazo; armar el brazo es dar fuerza a las concepciones del cerebro
Mi vocación es más en la composición que cualquier otra cosa realmente, la construcción de armonías con la guitarra, orquestar la guitarra como un ejército, un ejército de guitarras.
Los proyectos de planificación de ciudades debieran dirigirse de tal modo que, por ejemplo, al planificar una vivienda, un edificio o un grupo de edificios, la solución a la que se llegase fuera la natural para el año en que se levante el edificio.
Me he acostumbrado a no planificar
Los que tienen experiencia en el trabajo práctico deben estudiar la teoría y leer a conciencia. Sólo así podrán sistematizar y sintetizar sus experiencias para elevarlas al nivel de la teoría, y no tomarán sus experiencias parciales por verdades universales, ni caerán en el error del empirismo.