Creo que soy mejor escritor que pintor. Y en esto coincidía con mi padre. Lo importante de mi escritura no es el estilo, ni la sintaxis, ni los recursos discursivos; lo importante de mi escritura es sencillamente lo que digo, y eso llegará el día en que será aceptado.
El escritor necesita una pluma, el pintor un pincel, el cineasta todo un ejército
El valor en la vida es con frecuencia un espectáculo menos dramático que el valor ante el momento final; pero no deja de ser una magnífica amalgama del triunfo y tragedia. Un hombre hace lo que debe -sin importarle las consecuencias personales, los obstáculos, las presiones ni los peligros-, y este es el fundamento de toda moralidad humana.
Los versos fueron inventados para ayudar a la memoria. Conservarlos en el arte dramático es rendir tributo a la barbarie.
El literato de puerta cerrada no sabe nada de la vida. La política, el amor, el problema económico, el desastre cordial de la esperanza, la refriega directa del hombre con los hombres, el drama menudo e inmediato de las fuerzas y las direcciones contrarias de la realidad, nada de esto sacude personalmente al escritor de puertas cerradas.