Sinónimos de urbano

Yo voy a continuar como un ciudadano tranquilo, si me dejan en paz, en mi casa y jugando al trompo y al emboque

Cada soldado y cada policía será un pedagogo para persuadir al ciudadano a fin de que coopere con la Fuerza Pública

No quería, a ningún precio, que los vencedores de la guerra civil fueran los vencidos de la democracia.

También hubo dos, porque el franquismo fue la consecuencia de una Guerra civil en la que hubo dos bandos. No es lo mismo que el régimen nazi, donde había un solo verdugo.

¡Cuántos en las cortes tienen oficios preeminentes, a los cuales en una aldea no les hicieran alcaldes!.

Mil cortes en las hojas del árbol del mal equivalen a uno en sus raíces

Fue educado en los asuntos mundanos por un hombre joven y sin experiencia, y ello le dio la capacidad para generalizar que sólo poseen las personas poco experimentadas.

El hombre educado nunca discute con mujeres.

Nunca conserva firmes amistades quien sólo va atento a sus pretensiones.

Mantente abierto y atento a todo, escuchando

Porque yo tuve un día una mañana y un amor. fino y frío amor, tan claro que lo empañaba el tacto de pensarlo

Sobre el fino garabato de un tango nervioso y lerdo se irá borrando el recuerdo...

Creo que actualmente la cocina es el último reducto que el mundo civilizado nos ha dejado para ejercer la generosidad.

Barbarie y civilización son dos categorías de origen particular pero cuya aplicación puede ser universal. Sin embargo, ser civilizado no significa que se tengan estudios superiores, sino que se sabe reconocer la plena humanidad de los otros, aunque sean diferentes. No son bárbaros quienes no tienen buena educación o han leído poco, sino quienes niegan la plena humanidad de los demás.

Una palabra afable nada hace perder.

Para pasar por hombre amable basta con narrar bien y con no hablar nunca de sí mismo.

Los hombres sienten desprecio por la religión y temor porque sea cierta. Para remediar esto, es necesario empezar por demostrar que la religión no es contraria a la razón; después, que es venerable y digna de respeto; a continuación, hacerla amable e inducir a los buenos a desear que sea cierta y por último, probar que lo es.

La cosa más necesaria de que el cortesano tiene necesidad es tener en la corte un fiel y verdadero amigo, no para que le lisonjee, sino para que le reprenda.

En la corte es llegada a tanto la locura, que no llaman buen cortesano sino al que está muy adeudado.