Dejar que digan, escucharlo, sufrirlo todo; no espantarse por nada y continuar con fidelidad y buen ánimo
Nadie debe asustarse de lo que piensa: porque todo ha de ser pensado por alguien, y el mayor desatino puede ser un punto de vista de lo real.
¿Qué le hubiera gustado ser si no hubiera sido escritor? -Me hubiera gustado ser detective de homicidios, mucho más que ser escritor. De eso estoy absolutamente seguro. Un tira de homicidios, alguien que puede volver solo, de noche, a la escena del crimen, y no asustarse de los fantasmas.
Súbitamente comprendí que todas las cosas sólo van y vienen incluido cualquier sentimiento de tristeza: también se irá: triste hoy alegre mañana: sobrio hoy borracho mañana ¿Por qué inquietarse tanto?
Desear lo mejor, recelar lo peor y tomar lo que viniere.
Las pasiones contienen una injusticia y un interés propio que hace que sea peligroso seguirlas, y que convenga desconfiar de ellas, incluso cuando parecen muy razonables.
La fuerza es confianza por naturaleza. No existe un signo más patente de debilidad que desconfiar instintivamente de todo y de todos.
Pues entre las cosas que chacen sospechar de alguien, ninguna pone tanto en evidencia quién ha sido el autor de un crimen como el beneficio que se deriva de ese acto.
Ya entonces tenía el hábito de escribir las cosas importantes y más tarde, cuando se quedó muda, escribía también las trivialidades, sin sospechar que cincuenta años después, sus cuadernos me servirían para rescatar la memoria del pasado y para sobrevivir a mi propio espanto....
Es como para creer que al buen dios, que creó el mundo, no le gusta que los hombrecillos tengan por su parte (aunque a su reducida escala) una pasión parecida.
La muerte llama, uno a uno, a todos los hombres y a las mujeres todas, sin olvidarse de uno solo -¡Dios, qué fatal memoria!-, y los que por ahora vamos librando, saltando de bache en bache como mariposas o gacelas, jamás llegamos a creer que fuera con nosotros, algún día, su cruel designio.
El hombre debe considerar cuán rico es el reino que pierde al hacerse conformista.
El considerar la existencia de muchos hombres igualmente inmortales, es decir, igualmente infinitos, y por encima de ellos un dios todavía más inmortal y más infinito es una incongruencia.
El poeta debe escuchar con respeto la crítica ajena, porque el libro lanzado a la publicidad ya no le pertenece. Él lo entregó al juicio de los hombres, sin que nadie le obligase a ello. Asístele, sin embargo, el derecho de no ser demasiado dócil a admoniciones y consejos, y le conviene, sobre todo, desconfiar aún de sus propias definiciones.
Es más vergonzoso desconfiar de los amigos que ser engañado por ellos
Frente a tanto ministro pacifista que prefiere morir a matar, la decisión de matar a un enemigo que nos quiere matar está justificada como defensa legítima y si pudiera matar a quince miembros de Al Qaeda para liberar a los tres compatriotas secuestrados lo haría sin dudar
Grito que no creo en nada y que todo es absurdo, pero no puedo dudar de mi grito y necesito, al menos, creer en mi protesta. Albert Camus en El Hombre Rebelde
En la música el quid está en transmitir o no transmitir y para transmitir hay que hacerlo con honestidad porque nadie se va a creer a un tipo diciendo una cosa que no siente. Tienes que liberarte de tus miedos, de tu complejos, tus dudas y sobre todo olvidarte de querer dar siempre tu lado bueno, de querer quedar bien siempre
Cuando se deja de creer en Dios, enseguida se cree en cualquier cosa.
La constante afirmación de respetar la cultura de las poblaciones autóctonas no significa considerar los valores aportados por esa cultura. Bien pronto se advierte en este propósito una voluntad de objetivar, encasillar. yo los conozco, ellos son así. El exotismo es una de las formas de esta simplificación...
Es una falsedad del sistema cristiano considerar a las ciencias como una invención humana: lo único que es humano es su aplicación. Toda ciencia se basa en un sistema de principios tan fijos e inalterables como los que rigen el universo. El hombre no puede establecer principios. Lo único que puede hacer es descubrirlos.
Debes estimar como cosa torpísima el anteponer la vida al honor, y por salvar la vida perder la razón de vivir
¿Acaso no distinguís entre la devoción y la hipocresía? ¿Queréis tratarlas a ambas con igual idioma y rendir el mismo honor a la máscara que al rostro, igualar el artificio a la sinceridad, confundir las apariencias con las verdades, estimar al fantasma como, a la persona y a la moneda falsa como a la buena?
Dejar que digan, escucharlo, sufrirlo todo; no espantarse por nada y continuar con fidelidad y buen ánimo
Súbitamente comprendí que todas las cosas sólo van y vienen incluido cualquier sentimiento de tristeza: también se irá: triste hoy alegre mañana: sobrio hoy borracho mañana ¿Por qué inquietarse tanto?