La esperanza es un riesgo que debe correrse, el más arriesgado de todos. No es satisfacción propia, sino la más grande y dificil victoria del hombre sobre su alma.
El boxeo occidental es demasiado arriesgado a causa de las restricciones impuestas por las tácticas ilegales e indebidas.
No es de prudentes el ser cristianos y el seguir a Cristo. No es prudente vender lo que se tiene y darlo a los pobres. Es imprudente entregar la vida por Dios y por los hermanos.
En literatura, nada vuelve tan imprudente y tan atrevido al intelecto como la ignorancia de los tiempos pasados y el desprecio por los libros antiguos.
Lo difícil no es intentar algo arriesgado sino escapar del peligro al llevarlo a buen término
La esperanza es un riesgo que debe correrse, el más arriesgado de todos. No es satisfacción propia, sino la más grande y dificil victoria del hombre sobre su alma.
En literatura, nada vuelve tan imprudente y tan atrevido al intelecto como la ignorancia de los tiempos pasados y el desprecio por los libros antiguos.
Todos vamos descaminados: el menos imprudente es quien antes llega a arrepentirse.
El boxeo occidental es demasiado arriesgado a causa de las restricciones impuestas por las tácticas ilegales e indebidas.
Digo esto consciente de que nada podrá hacerse con la fuerza de un solo individuo. No, no voy a embellecer mis palabras. He pensado que podría aprovechar esta oportunidad, y he arriesgado mi vida al venir aquí para persuadiros. Si me he equivocado, estoy resuelto a morir, pero no he venido aquí con las manos vacías.
Todos vamos descaminados: el menos imprudente es quien antes llega a arrepentirse.
En literatura, nada vuelve tan imprudente y tan atrevido al intelecto como la ignorancia de los tiempos pasados y el desprecio por los libros antiguos.
Aunque arriesgado y difícil, procurar primero comprender, o diagnosticar antes de prescribir, es un principio correcto que se pone de manifiesto en muchas áreas de la vida. Es la marca de todos los verdaderos profesionales, tanto del médico clínico como del oculista.
La esperanza es un riesgo que debe correrse, el más arriesgado de todos. No es satisfacción propia, sino la más grande y dificil victoria del hombre sobre su alma.
En literatura, nada vuelve tan imprudente y tan atrevido al intelecto como la ignorancia de los tiempos pasados y el desprecio por los libros antiguos.
Muy bueno y muy justo es que los hombres amen a sus mujeres y que les den gusto en todo cuanto no se oponga a la razón; pero no que las contemplen tanto que, por no disgustarlas, atropellen con la justicia, exponiéndose ellos y exponiendo a sus hijos a recoger los frutos de su imprudente cariño.