Los países son como las estrellas: pueden resplandecer y brillar siglos enteros después de su extinción.
Si su líder es un gran hombre, también un país pequeño puede resplandecer ante el mundo como patria de la gran ideología de la época, como potencia en la ideología y la política.
Ya no es solo en el fulgurar de los astros, sino en la más insignificante hierbecilla, ¿No vemos por ventura a Dios si nos dedicamos a descubrirle con la luz de la inteligencia?
Tengo el orgullo de lucir este uniforme de preso con ustedes, porque prefiero morir en una cárcel podrido y no estar perfumado y bien vestido con el cartel de traidor a la Patria y al Ejército
En Inglaterra si quieres lucir rudo, sales y te emborrachas y llegas luciendo mal, pero si haces eso en América, es como ¿Tienes un problema con el alcohol?