Se nos inculca que la inevitable conflictividad del futuro obedecerá preferentemente a choques de civilizaciones porque sería una digresión metafísica suponer que el mundo de mercado unificado pueda combatir por cuestiones materiales de clase
Podemos ignorar estas diferencias y suponer que todas nuestras mentes son iguales. O podemos tomar las diferencias entre ellas
Debía tratarse de una enfermedad natural...Aunque resultaba imposible conjeturar qué clase de enfermedad producía aquellos terribles resultados.
No sabemos: solo podemos conjeturar
Ningún país puede funcionar cuando no hay alternativas a un verdadero desastre como el que estamos ahora, y eso que las circunstancias internacionales son las más favorables que uno podría imaginar para un país como Argentina
La tradicional lucidez de los depresivos, descrita a menudo como un desinterés radical por las preocupaciones, se manifiesta ante todo como una falta de implicación en los asuntos que realmente son poco interesantes. De hecho, es posible imaginar a un depresivo enamorado, pero un depresivo patriota resulta inconcebible.
¿Cómo no voy a creer en Dios? No hay artista que pueda no creer en Él. Dios nos hace pintar.
El entonces se repite sin cesar en el ahora, y el allá se repite en el aquí. Y, como por otra parte, a pesar de los más desesperados esfuerzos, no se ha podido representar un tiempo finito ni un espacio limitado, se ha decidido creer que el tiempo y el espacio son eternos e infinitos con la esperanza de conseguir una explicación un poco más perfecta.
Para figurarse una situación desconocida, la imaginación toma prestados elementos conocidos y a causa de ello no se la figura. Pero la sensibilidad, aún la más física, recibe, como un reguero de pólvora, la firma original y por mucho tiempo indeleble del nuevo acontecimiento.
¿Quién puede vanagloriarse de no tener defectos? Examinando los suyos, aprenda cada uno a perdonar los de los demás.
Dios es modesto, no se atreve a vanagloriarse de haber creado el mundo*
Se ha convertido casi en un comentario cliché, que nadie hoy en día alardea de ser un ignorante en literatura, pero es aceptable socialmente alardear de ignorar la ciencia y afirmar orgulloso que se es un incompetente en matemáticas.
Trabajo diariamente como si me fuera a quedar toda la vida, y no ignoro que puedo dejar de pertenecer mañana. Tampoco quiero alardear de fortaleza, pero es muy difícil que deje de luchar. Es mucho más probable que decidan por mí, que yo decida. Frente a la adversidad, siempre sigo luchando. Y sé hacerlo del único modo que se lucha en la adversidad: en soledad. Porque como la derrota produce sensaciones desagradables, es natural que todo el mundo tienda a distanciarse del que protagoniza la derrota. En este caso, me toca liderar a mí un proyecto que está desilusionando, y es natural que eso se viva en soledad, sin compañía. Y lo digo exactamente así: me parece natural, me parece lo normal, me parece que es lo que sucede siempre.
Y al ostentar desnuda tus hechizos, el mar, con un abrazo tembloroso, te envuelve en haz de onduladores rizos.
A veces miraba a los soldados heridos con envidia. Le parecía que las personas con cuerpos lacerados debían ser peculiarmente felices. Deseaba que él también hubiera podido ostentar una herida, un rojo emblema del valor.
Quien posea conocimientos especializados puede considerarlos como capital para envanecerse y despreciar a los demás.
Tengo a mayor delito preciarse del mal que haberlo hecho
Los hombres pueden preciarse de escribir honesta y apasionadamente sobre los movimientos de las naciones; pueden pensar que la guerra y la búsqueda de Dios son los únicos temas de la gran literatura; pero si la posición de los hombres en el mundo tambaleara por un sombrero mal escogido, la literatura inglesa cambiaría dramáticamente.
Nos sentimos muy felices y emocionados de todo lo que hemos avanzado. Pero también creo que tenemos un montón de camino por recorrer, cosas que hacer. No podemos poner nuestros pies en la mesa y darnos por satisfechos.
El comunismo es la explotación del fuerte por el débil. En el comunismo la desigualdad se forma al poner lo mediocre al lado de lo excelente.
Estamos acostumbrados a que determinadas causas generan efectos previstos. El fútbol se aparta de eso: una mínima causa puede ofrecer diferentes efectos. No se puede prever lo que va a pasar. Entonces, los que protagonizamos o pertenecemos al fútbol y hemos transcurrido tiempo suficiente dentro de él, sabemos que la mayoría de las cosas que suceden no obedecen a cómo las imaginamos, no son como las imaginamos, hay mucho de casual. Sinceramente, soy un segmento de un proceso que circunstancialmente fue exitoso.
El verdadero valor consiste en prever todos los peligros y despreciarlos cuando llegan a hacerse inevitables.
Si hemos de tomar en serio el respeto por la persona humana, debemos medir el progreso por el grado en que se puede pretender que las grandes masas del pueblo se mantengan con sus propios recursos y bajo su propia responsabilidad, mediante el ahorro y el seguro, y las múltiples formas de ayuda voluntaria de grupo.
La infancia tiene sus maneras peculiares de ver, pensar y sentir, y nada hay tan fuera de razón como pretender sustituir esas maneras por las propias nuestras.
Si queremos que se haga algo en el siglo XXI, el mensaje parece ser: No votes por alguien que dice que va a hacer algo, porque lo más probable es que no lo haga. Si quieres que pase algo en el siglo XXI, hazlo tú mismo.
Querría hacer el amor como los hipopótamos. Parece brutal, pero no lo es. Me emociona esa contradicción.
No considero nada vergonzoso honrar a los hermanos.
¡Si pudierais comprender cuánto mérito y gloria hay en honrar a este amable Corazón del adorable Jesús, y cuál sería la recompensa de aquellos que después de habérsele consagrado no pretenden sino honrarle! Sí; me parece que esta sola intención dará más méritos a sus oraciones y las hará más agradables delante de Dios que todo lo que pudieran hacer por otra parte, sin esta aplicación.
El carnaval parecía extenderse desde Venecia a lo largo de todas aquellas encantadoras playas, y el río estaba cubierto de naves que se dirigían hacia la ciudad, exhibiendo la diversidad fantástica de las máscaras. Hacia la caída de la tarde vieron con frecuencia grupos de danzantes bajo los árboles.
El Imperialismo es la base de la vida de todo pueblo que tiende a extenderse económica y espiritualmente
Los geólogos disfrutan con los terremotos y otras catástrofes naturales porque abren la tierra y dejan entrever sus secretos. Mi actitud hacia esta barcaza era similar. No había forma de sacarla a rastras de la isla y saltar dentro de la cavidad que había horadado, pero podía pasearme por los bordes con mis tarros de muestras y ver qué aparecía.
La poesía no se propone consolar al hombre de la muerte, sino hacerle entrever que vida y muerte son inseparables: son la totalidad
Pero cuando los fenómenos son tan complejos, los pronósticos no pueden señalar nunca un solo camino, y se puede incurrir en el error de esperar consecuencias demasiado rápidas e inevitables de causas que acaso no son todas las aplicables al problema.
Tengo menos de lo que esperaba; pero tal vez esperaba más de lo que debía esperar
En la tierra nada se presta tanto para alegrar al melancólico, para entristecer al alegre, para infundir coraje a los que desesperan, para enorgullecer al humilde y debilitar la envidia y el odio, como la Música
Las pequeñas doctrinas humanas, que sólo tienden a enorgullecer y a magnificar a unos pocos, no deberían ser sustituidas por el credo redentor mundial de Cristo.
Nadie nace tonto; los tontos son cultivados y ayudados a crecer como maleza por instituciones como la Cristiandad
He tratado por todos los medios de que te des cuenta de tu individualidad, de tu libertad, de tu absoluta capacidad de crecer sin ayuda de nadie. Tu crecimiento es algo intrínseco de tu ser.
No me compares con nadie, especialmente con mi hermano o hermana. Si me hacés quedar mejor que los demás, alguien va a sufrir; y si me hacés lucir peor que los demás, seré yo quien sufra
Tengo el orgullo de lucir este uniforme de preso con ustedes, porque prefiero morir en una cárcel podrido y no estar perfumado y bien vestido con el cartel de traidor a la Patria y al Ejército
-Es como leer primero el último capítulo de un libro
Es horrible admirar el libro de un hombre y después conocerlo, y destruir todo el placer que causó su obra con unas pocas posturas egocéntricas, de modo que no sólo a uno le disgusta su personalidad, sino que nunca puede volver a leer nada de él con una mente abierta. Su pequeño ego malo siempre está espiándolo a uno detrás de las palabras.