Sucede que estamos en la cárcel sucede que nos acercamos a los cincuenta años, y que faltan dieciocho más para ver abrirse las puertas de hierro. Sin embargo, hemos de seguir viviendo con los de fuera con los hombres, los animales, los conflictos y los vientos, es decir, con todo el mundo exterior que se halla tras el muro de nuestros sufrimientos.
... el optimismo es el abrirse de un alma a la luz; es una expansión hacia Dios y en Dios, es una espiritual unificación de sí mismo con el infinito.
La gloria es como un círculo de agua que nunca termina de ensancharse, hasta que a fuerza de dilatarse se pierde en la nada.
Cuando uno se pone a pensar en sus semejantes, podría echarse a llorar;en realidad podría pasarse el día llorando
Todo lo que ella hizo o deshizo, por disparatado que pareciese a un observador con prejuicios, fue hecho con lo que se deben hacer las cosas, es decir, con valor y sin temor a las consecuencias. Es esta forma, cada quien tiene el derecho de obrar cono le parezca. Pero echarse al agua a nadar y no querer al mismo tiempo mojarse la ropa, esto, Gerardo, es imposible.
La devoción a María gusta de difundirse y quien no intenta comunicarla y tiene poco entusiasmo y poder no tienen límites, y el tesoro de sus regalos demuestra que carece de tan preciosa devoción.
La devoción a María gusta de difundirse y quien no intenta comunicarla y tiene poco entusiasmo y poder no tienen límites, y el tesoro de sus regalos demuestra que carece de tan preciosa devoción.
Prefiero tocar sutilmente que alardear con la batería.
Trabajo diariamente como si me fuera a quedar toda la vida, y no ignoro que puedo dejar de pertenecer mañana. Tampoco quiero alardear de fortaleza, pero es muy difícil que deje de luchar. Es mucho más probable que decidan por mí, que yo decida. Frente a la adversidad, siempre sigo luchando. Y sé hacerlo del único modo que se lucha en la adversidad: en soledad. Porque como la derrota produce sensaciones desagradables, es natural que todo el mundo tienda a distanciarse del que protagoniza la derrota. En este caso, me toca liderar a mí un proyecto que está desilusionando, y es natural que eso se viva en soledad, sin compañía. Y lo digo exactamente así: me parece natural, me parece lo normal, me parece que es lo que sucede siempre.
Allí se levantaría enseguida, para su ronda matinal: pisar la tierra húmeda todavía del relente nocturno, respirar aire recién nacido, ver ensancharse la aurora por el cielo, escuchar los pájaros... Allí sí, pero aquí...
La Movida nunca tuvo teléfono, pero sí tuvo señales de humo para comunicarse unánimes el concierto de los Ramones o aquella noche alucinada de los Rolling, cuando nos flipábamos chupando el desodorante del sobaco de las chais, que eso coloca.
Sólo los tontos creen que el silencio es un vacío. No está vacío nunca. Y a veces la mejor manera de comunicarse es callando.
No sabía si llegaría o no a hablarle, y si le hablaba, cómo le iba a comunicar mi confusa adoración. Pero mi cuerpo era un arpa y sus palabras y sus gestos eran como dedos que recorrieran mis cuerdas.
Para mí, los mejores y más caros productos de la civilización han sido siempre -y lo siguen siendo- un libro bien escrito, en cuyas páginas haya algún pensamiento nuevo, y una pluma bien tajada con la que poder comunicar a los demás los míos propios
Otra cosa, hay que recalcar que las Fuerzas Armadas no están contra el pueblo, sino que están contra la hambruna que estaba causando el gobierno marxista del señor Allende, contra las colas, contra el hambre, contra la pobreza, contra la miseria, contra el sectarismo a que nos estaba llevando el señor Allende, mientras él se satisfacía con fiestas y parrandas en la casa...
Fue educado en los asuntos mundanos por un hombre joven y sin experiencia, y ello le dio la capacidad para generalizar que sólo poseen las personas poco experimentadas.
La crisis y, paralelamente, la acción concienciadora de las fuerzas de vanguardia conducirán indudablemente a generalizar la toma de conciencia y a plantear en términos más claros el conflicto entre la gran mayoría de la sociedad y los actuales poderes del Estado.
Hay que ser fuerte y obtener la victoria gracias al espíritu de decisión. Situarse más allá de la norma, trascender el combate, hacer de el una victoria espiritual.
En la vida, en el amor, no podemos trascender a convertirnos en la experiencia del ser amado, así que nos tenemos que quedar con lo que del amor somos capaces de experimentar por nosotros mismos.
Cada persona, en su existencia, puede tener dos actitudes: construir o plantar. Los constructores un día terminan aquéllo que estaban haciendo y entonces les invade el tedio. Los que plantan a veces sufren con las tempestades y las estaciones, pero el jardín jamás para de crecer
En verdad no puedes crecer y desarrollarte si sabes las respuestas antes que las preguntas.
El hecho de que el amor exija una posesión exclusiva lo sitúa a por debajo de la amistad; en esta es posible tener varios buenos amigos, los cuales, a su vez, pueden llegar a hacerse amigos entre si.
Es la función de todo comandante aquella de hacerse odiar por sus soldados, para que cuando acometan una orden en batalla la ejecuten con todo ese odio que reservan para ti, el odio extremo que les lleva a matar... Pero nunca pude imaginar que se pudiera llegar a odiar tanto, tanto odio, que se negaran a obedecer las órdenes de un superior; no se puede odiar tanto, no es posible.
Creo que toda la obra del hombre se mueve por amor. Si pudiera llegar a enunciar en pintura lo que Erik Satie expresó en sus Trois Gymnopédies y Gnossiennes, me consideraría feliz
¿Racionalizar la fe? Quise hacerme dueño y no esclavo de ella, y así llegué a la esclavitud en vez de llegar a la libertad en Cristo.
No hay que correr nunca tras un tranvía y una acción. !Paciencia! La próxima llega con toda seguridad
De pronto recordé que había soñado con eso: Un laberinto asfixiante en el que por más que caminara siempre estaba en el mismo lugar. Algo me atrajo, quizá la incertidumbre o mi propio miedo, y me largué a correr hacia cualquier parte.
Nuestra alternativa en Europa es ir a la cola y servir de rompeolas al Tercer Mundo, eligiendo la vía del capitalismo. Sorprende que la izquierda haya apostado por Europa.
Le hubiera gustado poder escaparse como un pájaro que se echa a volar, ir a beber juventud a algún sitio, muy lejos por espacios sin mácula.