Cumple con la gratitud del peregrino, no olvidar nunca la fuente que apagó su sed, la palmera que le brindó frescor y sombra, y el dulce oasis donde vio abrirse un horizonte a su esperanza
Bello es ver en la llanura una palmera piramidal; más, mujer, en tu hermosura todo es más regio, ¡todo es triunfal!
El que parma o España, o cualquier soberano de Europa, se atreva a invadir las fronteras de mi reino; lo cual, si sucediera, antes que una mancha caiga sobre mi honor por mi culpa, yo misma empuñaré las armas, yo misma seré su caudillo y su juez, y sabré recompensar sus virtudes en el campo de batalla.
En las flores silvestres de verano se estremece aún el sueño de gloria de los guerreros.
Cuando un niño comienza a sonreír, con una pequeña bifurcación de amargor y dulzura, las orillas de su sonrisa desembocan sin burlas en la anarquía del océano. Se siente mejor que nadie: juega a la gloria con los ángulos de la boca y ya cose la sutura irisada al conocimiento infinito de la realidad.
No le pido tanto al presidente electo de El Salvador, salvo que no olvide ninguna de las palabras que pronunció la noche de su triunfo ante los miles de hombres y mujeres que habían visto nacer finalmente la esperanza
El triunfo es eso: llegar, conocer y seguir siendo tú. El triunfar para mí es seguir siendo tú por encima de todo
Esta canción es un argumento. Es una pelea entre compañeros. Vos sos amable al intentar dar palmadas alrededor de la cara de alguien intentando que despierte y deje de lado una idea. En mi caso es una pelea que yo no tenía mientras él estaba vivo.
Atrae la felicidad a risotadas, a palmadas de gratitud