Tengo la sensación de que usted desprecia su cuerpo, que sólo da paso al arte, señora profesora. Dice Klemmer. Sólo le permite satisfacer sus necesidades primordiales, pero no basta sólo con comer y dormir. señorita Kohut, usted piensa que su exterior es su enemigo y que sólo la música es su amiga. Sí, mírese en el espejo, ahí puede verse: jamás tendrá un mejor amigo que usted misma.
Lo peor fue limpiar las arañas de cristal. La semana pasada, la señorita Caroline le hizo limpiar cada maldita lágrima. Disculpe mi lenguaje, doctor. Pero esas arañas habría que echarlas abajo.