He vivido con cuidado, me he abrigado de los vientos fríos, he comido con moderación los frutos de la temporada, he bebido buen clarete, dormido en mis propias sábanas; viviré mucho tiempo.
He abrigado siempre una gran simpatía hacia Inglaterra. La República Argentina, que será algún día una gran nación, no olvidará jamás que el estado de progreso y prosperidad en que se encuentra en estos momentos, se debe en gran parte al capital inglés