Así es el ser humano. Comenzad a alabarlo y entonces ya podéis hacer con él lo que se os venga en gana, pues os lo habéis metido en el bolsillo
Pero en este momento nos encontramos en la situación del detective que sabe que un hombre va a cometer un asesinato. Ni siquiera sabe con seguridad si lleva o no una pistola. No puede hacer nada, excepto seguirle y esperar a que saque el arma del bolsillo y apunte. Entonces, y sólo entonces, el detective puede dispararle o detenerlo.
Aprende de mí que un hombre prudente, que ha escuchado una acusación penal relacionados con tantos pormenores absurdo deja de ser prudente cuando se hace a sí mismo el eco de lo que ha escuchado, ya que si la acusación debía ser un factor calumnia, el orador A sí mismo convertido en el cómplice de la slanderer.
Es sólo la insuficiencia del código penal la que salva a los hackers de una acción judicial muy seria
El insulto, el presidio y la amenaza de muerte no pueden impedir que el utopista sueñe...