Romper con una tradición (...) que ha permitido a España resolver un famoso 23 de febrero y tantas cosas de elementos de estabilidad en estos años, ciertamente de transiciones difíciles, es desvariar
El entusiasta del karate que exagera y por lo tanto pervierte la naturaleza del arte, es un charlatán no muy sincero y ciertamente podrá tener éxito en fascinar a los que lo escuchan y convencerlos de que el karate es a veces terrible. Pero lo que dice es totalmente falso y además él lo sabe.
Se piensa que el amor loco puede curarlo todo. Pues no. Si quieres que el matrimonio funcione, necesitas tener algo más en común. Me casé con tres hombres atractivos, de mucho talento, que sabían fascinar a las damas. Supongo que ellos podrían decir lo mismo de mí. Pero teniendo en cuenta que entre mis tres maridos han reunido una colección de veinte esposas, no creo todo fuera culpa mía.
Estaba completamente exaltado, como el hombre que ve y que camina sin hacer ningún ruido, en una ciudad de ciegos. Me entraron ganas de bromear, de asustar a la gente, de darle una palmada en la espalda a algún tipo, de tirarle el sombrero a alguien, de aprovecharme de mi extraordinaria ventaja.
El manejo de memoria del PowerPC puede ser usado para asustar niños pequeños.
El ataque irracionalmente sistemático, la permanente descalificación de las personas y de cualquier tipo de solución con que se trata de enfocar los problemas del país, no son un arma legítima porque, precisamente, pueden desorientar a la opinión pública en que se apoya el propio sistema democrático de convivencia.
Esta incomprensión lo hace reaccionario, pues los llamamamientos a la sociedad y al Estado, es decir, a los ideólogos y los políticos de la burguesía, sólo pueden desorientar a los socialistas y tomar por aliados a los peorers enemigos del proletariado, sólo pueden frenar la lucha de los obreros por la emancipación en lugar de contribuir a intensificar, esclarecer y organizar mejor esta lucha.
El arte de la pintura consiste en aclarar y oscurecer los tonos sin decorarlos.
Esta incomprensión lo hace reaccionario, pues los llamamamientos a la sociedad y al Estado, es decir, a los ideólogos y los políticos de la burguesía, sólo pueden desorientar a los socialistas y tomar por aliados a los peorers enemigos del proletariado, sólo pueden frenar la lucha de los obreros por la emancipación en lugar de contribuir a intensificar, esclarecer y organizar mejor esta lucha.
El ataque irracionalmente sistemático, la permanente descalificación de las personas y de cualquier tipo de solución con que se trata de enfocar los problemas del país, no son un arma legítima porque, precisamente, pueden desorientar a la opinión pública en que se apoya el propio sistema democrático de convivencia.
El deseo de ser recompensado por la creatividad de uno no justifica privar al mundo en general de toda o parte de esa creatividad.
Los hombres pasan y se terminan; las ideas se eternizan en la conciencia de las generaciones. Se puede a veces maniatar y hasta privar de la vida de los periodistas; pero siempre que esto sucede surgen otros hombres nuevos que ligados a la idea primitiva van haciendo una gigantesca cadena de pensamientos que al fin termina por ahogar toda actitud que no está fundada en la libertad, en el bien de la república, y en los imperativos categóricos de la moral, los cuales pueden ciertamente oscurecerse por mucho tiempo, pero no eternamente.
Ya habéis visto los duros epítetos que los órganos del gobierno han arrojado sobre esta manifestación. Se ríen de los derechos políticos, de las elevadas doctrinas, de los grandes ideales, befan a los líricos, a los retardatarios que vienen con sus disidencias de opinión a entorpecer el progreso del país.
Me quisiera emborrachar de sentimientos te quisiera yo borrar del pensamiento
Desde que encontré tus labios, como una mariposa al descubrir su miel, necesito tu boca para embriagar tus noches y tus manos sedientas que alimentan mi piel.