Observo que una gran parte de la especie humana no cree en Dios y no sufre por ello ningún castigo visible. Y si hubiera un Dios, me parece muy improbable que tuviera una vanidad tan enfermiza como para sentirse ofendido por quienes dudan de su existencia
Un amigo ofendido es el más encarnizado enemigo
Loco: Dícese de quien está afectado de un alto nivel de independencia intelectual; del que no se conforma a las normas del pensamiento, lenguaje y acción que los conformantes han establecido observándose a sí mismos; del que no está de acuerdo con la mayoría: en suma, de todo lo que es inusitado.
El ser humano no tiene un destino, sino que el sujeto del destino es como tal indeterminable. Puede el juez ver destino donde quiera; al castigar, lo dicta ciegamente. Y aunque el hombre no queda afectado por esto, sí se afecta la mera vida en él, que, en virtud de la luz, participa en la culpa natural como participa en la desdicha.
Quiero pedir disculpas a todas aquellas personas a las que he decepcionado a causa de mi comportamiento, que ha perjudicado a mi familia, amigos, compañeros y socios.
Me ofrecieron ser seleccionador de Inglaterra en un par de ocasiones pero, naturalmente, lo rechacé. De todas maneras es un cáliz envenenado. Es un trabajo horrible. Además me hubiera perjudicado el hecho de ser escocés
Me sentía humillado y ofendido por la vida. ¿Cómo era posible que estuviese en aquella actividad, la más antipoética del mundo? Después de dos o tres años comencé a ser más humilde, a decirme: que se vaya al carajo el poeta.
De esta manera sangrienta, han sido una vez más castigados los asesinos extraños y los patricidas que durante tanto tiempo han humillado la soberanía de mi amada Nicaragua
Hay quien diga al verle pasar: - Ahí va un infame; porque el marido ultrajado que no se venga es un infame-
Te quiero. Te quiero por tu bravura y tu tenacidad, y tu brío y tu implacable dureza. ¿Cuánto te quiero? Tanto que, hace un momento, hubiera ultrajado la hospitalidad de la casa que nos ha acogido a mi familia y a mí, hubiera olvidado la esposa más buena que jamás pueda tener un hombre...
Es un principio de la naturaleza humana odiar a quienes nos han injuriado
Un hombre le había injuriado malamente y no tomó pena ni se movió por ello, y como un amigo suyo se maravillase mucho, díjole: A mí no me dice mal, porque lo que dice no me compete a mí ni en mí se hallará. Al revés lo hace ahora el común de la gente que más se altera cuando no merece las injurias que se les dicen.
No tengo amigos en la profesión y eso me ha lastimado mucho
Cuando Bill Thompson (editor) me llamó para darme la noticia, pensé que sólo hablaría de u$s 5. 000 o algo parecido. ¡Pero él dijo U$S 400. 000! Mi esposa no estaba en casa y lo único que pude pensar en hacer fue salir corriendo a comprarle un secador de pelo. Corría a los tropezones por la calle y pensé que si no prestaba atención podía ser atropellado por un auto...
Ser atropellado da de verdad bastante miedo. Pasas ese medio segundo donde te dices '¡oh, dios!', cierras los ojos y rechinas los dientes. Tuve que preguntarle al poli si me había muerto.