Condenar la televisión sería tan ridículo como excomulgar la electricidad o la teoría de la gravedad.
Resulta tan ridículo decir que la castidad es una virtud como afirmar que lo sería privarse de comer.
Tienes que dejar salir tu friki que llevas dentro...es una terapia. ¿Para qué tener vergüenza? Si no haces daño a nadie, ¿qué más te da? Saca tu friki