La probabilidad de perder en la lucha no debe disuadirnos de apoyar una causa que creemos que es justa.
Harto de ricos por la tele ostentando, como si se nos tuviera que caer la baba... ¡faltan más comandos! Me dan asco teniendo miedo a los rojos, les comieron el coco, yo antisistema y orgulloso, aberrante debería ser no serlo, el delito: apoyar esto que destruye el planeta entero
Una verdad a la que no se da crédito nos hiere mucho más que una mentira. Requiere un gran valor respaldar una verdad inaceptable para nuestra época; conlleva siempre un castigo, que suele ser la crucifixión.
Cuando una necesidad posee un carácter suficientemente universal y suficientemente uniforme como para que sea propio llamarle necesidad pública, puede convenir a todos los hombres que forman parte de un conglomerado (comuna, provincia o nación), proveer a la satisfacción de esa necesidad por medio de una acción o una delegación colectiva.
A Goethe le gusta demasiado el ambiente de la Corte; le gusta más de lo que puede convenir a un poeta.
Un traidor es un hombre que dejó su partido para inscribirse en otro. Un convertido es un traidor que abandonó su partido para inscribirse en el nuestro.
El hombre espiritual no debe inscribirse en ningún partido; su reino es el de la justicia, que en todas partes está sobre toda discusión
Uno puede apuntarse a eso, el proceso de paz. Pero creo que es una enorme irresponsabilidad apuntarse a eso. Ya no se trata sólo de la irresponsabilidad o de la ilegalidad, que a algunos no parece preocuparlos. Estamos ante un problema de eficacia. Quien negocia, pretende ceder. En estas circunstancias, pierde siempre.
En la línea del horizonte, hijos míos, parecen unirse el cielo y la tierra. Pero no, donde de verdad se juntan es en vuestros corazones, cuando vivís santamente la vida ordinaria...
Dionisio dice: la carrera no es más que un retorno de todas las criaturas y un unirse en la descreación. Y cuando el alma llega a este punto, entonces pierde su nombre y Dios la atrae hacia sí, de manera que se anonada, así como el sol atrae hacia sí a la aurora para que se aniquile. (...) Pero la paz absoluta no está en ninguna parte excepto en un corazón separado.
Pero cuando los fenómenos son tan complejos, los pronósticos no pueden señalar nunca un solo camino, y se puede incurrir en el error de esperar consecuencias demasiado rápidas e inevitables de causas que acaso no son todas las aplicables al problema.
No obstante, aunque ese Estado no sea imitable en todo, tuvo muchos elementos dignos de señalar y que quizá fuera muy aconsejable imitar.