Es natural que el hombre ame a su país y a sus amigos y odie a los enemigos de ambos. Pero al escribir la Historia debe prescindir de tales sentimientos y estar dispuesto a alabar a los enemigos que lo merezcan y a censurar a los amigos más queridos y más íntimos.
Cuando la historia no se puede escribir con la pluma, entonces debe escribirse con el fusil
Ya que tú sola eres la que gobiernas la naturaleza de las cosas y sin ti nada emerge a las resplandecientes riberas de la luz y nada se pone contento ni amable, deseo que tú seas mi aliada para escribir estos versos, que yo intento componer acerca de la naturaleza de las cosas.
En este momento, puede que reciba más de las canciones que de las drogas. Pero es más fácil conseguir drogas que componer una canción.