Para mí la adopción de hijos por homosexuales no es una cuestión moral, sino científica. En lo que todos estamos de acuerdo es que hay que proteger al menor, y, de momento, nadie en el mundo ha dicho que los niños tengan las mismas condiciones dependiendo de quién los adopte. Ahí tienen la palabra los científicos.
Mucha gente quiere que el gobierno proteja a los consumidores. Un problema mucho más urgente es proteger a los consumidores del gobierno.
No se establece una dictadura para salvaguardar una revolución; se hace la revolución para establecer una dictadura.
Guardemos a Cristo en nuestra vida, para guardar a los demás, salvaguardar la creación
Juro por Dios y sobre los Santos Evangelios, cumplir y hacer cumplir las Leyes Fundamentales del Reino y guardar lealtad a los principios que informan el Movimiento Nacional.
Esa mujer se parecía a la palabra nunca, desde la nuca le subía un encanto particular, una especie de olvido donde guardar los ojos...
No hace falta defender siempre la misma opinión porque nadie puede impedir volverse más sabio.
Nuestra querida enfermera jefe es de las pocas con la fuerza de espíritu suficiente para defender tan grande y antigua tradición faulkneriana en el campo del tratamiento de los desechos de la cordura: la Cauterización del Cerebro.
Es mucho más fácil conservar la integridad que recuperarla
Lo que (Sanchis Banús) deja a los suyos no reclama presencia de notario: conducta. Es todo cuanto yo pido a los dioses benévolos que me permitan conservar para los míos. Cuanto la ambición pudiera allegar en faenas duras, en afanes lastimosos, no vale lo que una bella conducta.
Aprender a andar en bicicleta no significa aprender a mantener el equilibrio, sino aprender a no perturbar ese equilibrio, aprender a no interferir.
¿Cómo mantener a la gente a un brazo de distancia y que nunca se acerque demasiado? ¿Cómo desconfiar de aquellos que supuestamente amas más? ¿Cómo aparentar que estás bien y no necesitas ayuda de nadie? ¿Cómo sentirte despreciable a no ser que le estés sirviendo o ayudando a alguien? Te enseñaré todo esto en ocho pasos sencillos... (Eight Easy Steps - 2004).
Uno puede ser llamado en cualquier momento a librar una dura batalla; si se muere habiendo descuidado su pulcritud, se da muestra de una relajación general de las buenas costumbres y uno se expone al desprecio y al descuido del adversario. Esta es la razón por la cual los viejos y jóvenes Samuráis han aportado siempre un gran cuidado en su presentación.
Para librar a vuestros hijos de esos vicios y calamidades haced que desde niños se den a la virtud y trabajos.