Por medio del ajedrez desarrolle mi carácter... El ajedrez nos enseña, primero que todo a ser objetivos... en ajedrez uno solo puede llegar a ser Gran maestro solo si es capaz de reconocer sus errores. Es exactamente como en la vida.
Vaya, pues sí que viven bien los maestro. Si fuera humano me gustaría ser como él, maestro de escuela. Uno puede dormirse cuando quiere y, aun así, siguen considerándote un buen maestro. Así que no le veo yo problema a ser maestro y gato a la vez.
Creo que la novedad fue que no tenían ningún carácter docente ni moralista ni eran aplicadas al programa escolar. Era un concepto revolucionario el pensar que la versificación no tenía porque tener un contenido didáctico.
El gran desafío, tanto para el docente como para el alumno, es encontrar ese equilibrio entre grado de desafío de una actividad y el grado de habilidad de la persona que la realiza
Durante la Primera Guerra Mundial mi coronel me presentó a un oficial superior con las palabras: En la vida civil el teniente Hahn es profesor y descubrió el mesotorio. El oficial contestó: Entiendo que el teniente Hahn es químico: ¿pero qué tiene que hacer con animales antediluvianos?
La esencia profunda de ese Estado, según el resumen del profesor Burdeau, es la colonización del Estado por la técnica, el despotismo de la técnica, que le dicta sus objetivos y saca los problemas del terreno de la política y de la lucha social para colocarlos únicamente en el aséptico, aclasista y funcional de los dictados del desarrollo tecnológico.
La tarea del educador solo puede tener como base la normalización del niño y así conseguir la normalización del hombre y la renovación de la sociedad.
No puede haber conocimiento pues los educandos no son llamados a conocer sino a memorizar el contenido narrado por el educador. No realizan ningún acto cognoscitivo, una vez que el objeto que debiera ser puesto como incidencia de su acto cognoscente es posesión del educador y no mediador de la reflexión crítica de ambos.
El tiempo es la mejor manera de comprobar quién es el instructor más sabio y paciente
El director me dijo que tenía que convertirme en un modelo para los estudiantes y que debía, por tanto, comportarme en consonancia. También me dijo que un verdadero pedagogo es aquel que no solo imparte conocimientos sino que ejerce una influencia moral positiva en sus alumnos.
Un riguroso pedagogo es algo más terrible que un terrible demagogo.
Frecuentemente me piden que sea mentor de alguien. Una de las cosas en común que he notado es cuán pocas de esas solicitudes vienen con una de las palabras más importantes en los negocios. Y esa palabra es intercambio. En otras palabras, si usted pide algo, ¿Qué es lo que usted está dispuesto a dar?
El lenguaje no es el aya sino la madre del pensamiento.
El tiempo es la mejor manera de comprobar quién es el instructor más sabio y paciente
Actualmente oigo clamar por doquier: ¡No razones! El oficial ordena: ¡No razones, adiéstrate! El asesor fiscal: ¡No razones y limítate a pagar tus impuestos! El consejero espiritual: ¡No razones, ten fe!
Fallar en conocer la situación de los adversarios por economizar en aprobar gastos para investigar y estudiar a la oposición es extremadamente inhumano, y no es típico de un buen jefe militar, de un consejero de gobierno, ni de un gobernante victorioso.
Cuando la cólera sale de madre, no tiene la lengua padre, ayo ni freno que la corrija.