La vida es mi arte, protección frente a la muerte, así sin autorización vivo
Hoy día es frecuente que se vea al votante más que nada como un blanco fácil para la manipulación de los que buscan su consentimiento para ejercer el poder.
Los Estados, ya sean monárquicos, constitucionales, democráticos o comunistas, tienen que contar con el consentimiento de la opinión pública si quieren lograr sus proyectos y, de hecho, un gobierno no gobierna si no es en virtud de la aquiescencia pública.
Lo respetaba, pero no le hacía ninguna concesión y, algunas veces con un deleite especial y maligno, le hacía sentir que él también estaba en sus manos.
La evolución de la vida, y el origen evolutivo de la humanidad, están establecidos científicamente tan firme y completamente como cualquier suceso histórico no presenciado por observadores humanos. Cualquier concesión a los anti-evolucionistas, sugiriendo que hay razones científicas para dudar del hecho de la evolución, sería propagar una vulgar falsedad.
-¿Es que la facultad de poder del artista no es la condición primera del arte?.
No renunciamos a nuestra facultad de amar lo que nos parezca malo. Amar y odiar, pues solo los que saben odiar saben amar. Solo pedimos una cosa: eliminar todo lo que en la sociedad actual impide el libre desenvolvimiento de estos sentimientos, todo lo que falsea nuestro juicio: Estado, iglesia, explotación, el juez, el clérigo, el gobierno, el explotador.
Nada destruye más el respeto por el Gobierno y por la ley de un país que la aprobación de leyes que no pueden ponerse en ejecución.
La búsqueda de la aprobación se convierte en una zona errónea sólo cuando se convierte en una necesidad en vez de un deseo.
La belleza es una promesa de la posible conformidad entre el alma y la naturaleza.
No sé de nadie que haya hecho más por la humanidad que Jesús. De hecho, no encuentro nada malo en el cristianismo. El problema está en ustedes los cristianos, pues no viven en conformidad con lo que enseñan
Vosotros compatriotas, que sabéis burlaros del mar con denuedo y bizarría, vais a cubriros de gloria, salvando al país y escarmentando el atrevimiento insolente de los malvados.
La tontería protege de la vergüenza, igual que el atrevimiento de la pobreza.
El Estado llegó a ser, por culpa de una sociedad explotadora, el objeto de una expoliación continua, y esos hombres no suben las escaleras de la jerarquía social a través de su trabajo y sus méritos, sino a través del abuso culpable del poder político, ganado después de robar sumas importantes del dinero público.
El abuso del poder es una enfermedad, al parecer incurable del ser humano y, claro, que produce desorden.
La insolencia es el escudo de la desvergüenza y la fortaleza de la cobardía
No preocuparse en absoluto de lo que la gente opina de uno mismo, no sólo es arrogancia, sino también desvergüenza
Hay quienes van más lejos. Incluso oyen el rumor de la lluvia, sienten las frías gotas en la espalda y en la nuca, miran el puente y a los hombres como si se vieran allí retratados, en esa carrera que nunca llega al fin de un camino sin fin eternamente por recorrer, y en su desfachatez creen que en realidad así es.
El Rey ha estado bien en su sitio. Era un Rey que venía del franquismo; la gente empezó a llamar a Juan Carlos el breve porque lo había puesto Franco. Cuando se termina el franquismo, él se convierte en el Rey de la democracia
Dios hizo el mundo en seis días. Hasta el momento nadie se ha podido explicar a qué venía tanta prisa. Así ha quedado como ha quedado.
Sólo si uno acepta las peores vicisitudes, no sólo con resignación, sino con aquiescencia radiante, puede obtener la libertad.
Los Estados, ya sean monárquicos, constitucionales, democráticos o comunistas, tienen que contar con el consentimiento de la opinión pública si quieren lograr sus proyectos y, de hecho, un gobierno no gobierna si no es en virtud de la aquiescencia pública.
En contraste, paradójicamente, fue precisamente en mi país donde encontré de parte de algunos las mayores objeciones, reservas e indiferencia respecto al otorgamiento del Nobel
Lo que el escritor pide al lector no es tanto su beneplácito como su atención.
Por lo visto no había oído mis pasos y ni siquiera se movió cuando, conteniendo el aliento y con el corazón a galope, pase junto a ella...
Los momentos más lindos como cura son los que pasé con la gente. Eso me queda siempre en el corazón, el haber caminado junto a un pueblo que busca a Jesús.
José Mourinho es un gran técnico y una gran persona. Lo ha ganado todo en la Premier y en Italia, así que estoy seguro de que, con él en el banquillo, el Real va a conseguir más títulos. Si no gana la Champions el Manchester United, lo hará el Madrid
Sólo quien está seguro de no quebrarse cuando el mundo se muestra demasiado estúpido o demasiado abyecto para lo que él le ofrece; sólo quien frente a todo esto es capaz de responder con un sin embargo; sólo un hombre de esta forma construido tiene vocación para la política
Lo que ahora es el título general es el de 10 viajes y dentro del de 10 viajes hay muchas categorías: hay un metrobús como puede haber otras cuestiones
Si Tartakower dedicase más atención a su juego en los torneos en vez de escribir sus artículos, sería acaso el más temible aspirante a los primeros lugares y un serio candidato al título mundial.
Si había alguien en Brasil que dudaba de que un tornero mecánico, salido de una fábrica, llegase a la Presidencia, el 2002 probó lo contrario. Y yo, que tantas veces fui criticado por no tener un diploma de nivel superior, recibo ahora mi primer diploma: el de presidente de la República de mi país. Muchas gracias.
No tengo diploma y por eso nunca tuve que olvidar lo que estudié. Esa es la pura verdad.
También en la moderación hay un término medio, y quien no da con él es víctima de un error parecido al de quien se excede por desenfreno
Salud piden los hombres a los dioses en sus oraciones, pero no se percatan de que tienen en sí mismos control sobre ella y en que, como hacen por su desenfreno lo contrario de lo debido, se convierten en traidores de su salud por sus propios apetitos.
No podría haber culturas rigurosamente idénticas. Imaginar que se va a hacer una cultura negra es olvidar singularmente que los negros están en vías de desaparecer, puesto que aquellos que los han creado están contemplando la disolución de su supremacía económica y cultural. No habrá cultura negra porque ningún político piensa tener vocación para dar origen a repúblicas negras.
El gran peligro de Europa es la disolución de la unidad de España.
Demasiado libertinaje en la juventud seca el corazón, y demasiada continencia atasca el espíritu.
Las costumbres de la clase militar son la disciplina, el ocio, la ignorancia, la crueldad, el libertinaje y la borrachera, es decir, la falta de libertad. A pesar de todo esto, esa clase superior es respetada por todos