Los temores, las sospechas, la frialdad, la reserva, el odio, la traición, se esconden frecuentemente bajo ese velo uniforme y pérfido de la cortesía.
Las ideas no tienen importancia alguna. Las ideas son el uniforme vistoso que se les pone a los sentimientos y a los instintos. Una costumbre indica mucho más el carácter de un pueblo que una idea.
Ser filósofo es como cualquier otra profesión. En este caso, cobras a cambio de mantener viva una tradición importante, y si tienes suerte, puedes conseguir escribir algún libro que sea leído por los que no son filósofos. ¡Y eso es ya todo un éxito!
El liberal español unía al defecto común a todos los liberales del mundo, a saber, una ceguera de colores que sólo le permitía ver el antiliberalismo negro, pero no el rojo: la vieja tradición anticlerical
La libertad es la ventana abierta por la que mana la luz del espíritu humano y de la dignidad humana
Más vale maña que fuerza.