Amargo sabe el pan ajeno, dice Dante, y pesados los escalones de una casa extraña, ¿Y quién mejor que la pobre pupila de una vieja aristócrata para conocer la amargura de la dependencia?
El lenguaje hace que la gente no pueda salir de su ambiente. Enseñad a un hombre bajo a expresarse como un aristócrata y lo cambiaréis.
El consumo ostensible de bienes valiosos es un medio de aumentar la reputación del caballero ocioso. Al acumularse en sus manos la riqueza, su propio esfuerzo no bastaría para poner de relieve por este método su opulencia. Recurre, por tanto, a la ayuda de amigos y competidores ofreciéndoles regalos valiosos, fiestas y diversiones caras.
Un caballero es quien hace, no lo que quiere, sino lo que debe hacer
Soy poeta. Con tres años, ya era capaz de asombrar a cuantos eran testigos de la elocuencia con que manejaba nuestro ilustre idioma. Aprendí a leer y a escribir. Memoricé a los grandes, a los mediocres y a los muy malos. He ganado más guerras de poesía en los países sirios que cualquier otro contendiente.
General: Chile no olvidará jamás el nombre del ilustre Inválido que el día de hoy se presentó herido en el campo de batalla.
Es un gesto muy generoso que yo agradezco profundamente pero que a estas alturas ya no va a cambiar nada, yo voy a seguir igual, escribiendo, solo que con la vida un poco más complicada, claro; pero en fin, tampoco me voy a quejar,porque sería un mentiroso.
Todo hombre lo bastante inteligente y generoso para aportar a la empresa su esfuerzo, por pequeño e insignificante que sea, obtendrá de la lucha misma un noble goce que no estará dispuesto a vender por ningún placer egoísta