Cualquiera que haya destruido un prejuicio, un solo prejuicio, es un bienhechor de la humanidad
A este Dios veraz y bienhechor del hombre se debe toda acción de gracias.
Cualquiera que haya destruido un prejuicio, un solo prejuicio, es un bienhechor de la humanidad
A este Dios veraz y bienhechor del hombre se debe toda acción de gracias.
Si no hay muerte, no puede haber nacimiento. El significado es que una generación debe morir para que pueda venir la siguiente. No bien concibes o das nacimiento a un niño, tú eres el muerto. El niño es la nueva vida, y tú eres simplemente el protector de esa nueva vida.
Un protector excelente de la oveja, es el lobo.
¿Acaso no es progreso, por el contrario, si las grandes masas del pueblo cumplen la mayoría de edad en términos económicos, gracias a sus ingresos crecientes, y se hacen responsables de ellas mismas, de manera que podamos disminuir el Estado benefactor en lugar de inflarlo más y más?
Los principios son claros y explícitos. El libre mercado está bien para el tercer mundo y su creciente contraparte en nuestro país. A las madres con chicos a cargo puede instruírselas firmemente acerca de la necesidad de la autosuficiencia, pero no a los ejecutivos e inversores dependientes, por favor. Para ellos debe florecer el estado benefactor