Tomé drogas durante 18 años y nunca estuve tan colgado como para decir: ¿sabes qué? ¡Los Kaiser Chiefs son buenísimos!
A Stalin no se le puede entender como socialista, pero es perfectamente coherente como zar
Juro por la burra de Balaam que, si sigue callando, haré que se arrepienta de su obstinación. Y diciendo estas palabras, el califa no pudo evitar lanzar sobre el desconocido una de sus peligrosas miradas; éste ni se inmutó: el ojo asesino no le produjo el menor efecto.
Al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios.
Con la segura confianza de que el pueblo mexicano lucharía sin cesar contra la inicua invasión extranjera, en defensa de sus derechos y de su libertad. Salió el gobierno para seguir sosteniendo la bandera de la patria, por todo el tiempo que fuera necesario, hasta obtener el triunfo de la causa santa de la independencia y sus instituciones de la República