Es más difícil ser rey sin corona, que una persona más normal...Pobre de Dios que no sale en revistas, no es modelo ni artista, ni de familia real.
El último de estos demonios de los elementos se llama El rey de las Nubes; su figura es la de un bello joven y se caracteriza por dos grandes alas negras. Aunque su aspecto es realmente encantador, no abriga mejores intenciones que los demás. Se ocupa continuamente de provocar tormentas, arrancar bosques de cuajo y derrumbar castillos y conventos sobre las cabezas de sus moradores.
Sólo puede ser independiente el hombre que se basta a sí mismo y que sabe vivir solo
Dios ha de concederme bastante fortaleza para no descender a la tumba sin dejar a mi Patria libre, independiente y triunfante.
El sexenio de Carlos Salinas fue el más corrupto y desbarató nuestro patrimonio, malvendiéndolo a sus cómplices: eran las grandes columnas estratégicas del desarrollo autónomo de México. Ese es el padrino de Peña Nieto
Todo arte, tomado como un medio para pasar el tiempo libre, se convierte en un entretenimiento, al tiempo que absorbe temas y formas del arte autónomo tradicional como bienes culturales.
Un elevado conocimiento está sólo a medias en el círculo luminoso del intelecto; la otra mitad tiene sus raíces en el oscuro suelo de lo más recóndito; de suerte que un gran conocimiento es ante todo un estado de ánimo y sólo en su punta más exterior está el pensamiento, como una flor.
Paranoia es sólo un elevado sentido de conciencia
¡Cuántos son los que con voces llenan los cielos y tierra y sin cesar de sus labios se desprenden duras quejas! ¡Cuán dichoso yo sería, van diciendo, si pudiera hacer esto o bien aquello! -¡Hazlo! La suerte contesta, y en vez de crecer su dicha, crecen a veces sus penas, que sólo es dichoso el hombre que con poco se contenta, a su suerte se acomoda y delirios no alimenta.
Dos leyes contrarias paracen estar luchando hoy entre sí. Una es una ley de sangre y de muerte que imagina sin cesar nuevos medios de destrucción y obliga a las naciones a estar constantemente preparadas para el campo de batalla. La otra es una ley de paz.
Podría escuchar cien veces tus historias de china...Ella le coge las manos y las apoya en su propia cara, las besa. Le pide que le cuente. El chino cuenta, con los ojos fijos sólo en ella, la pequeña blanche, una historia de la china imperial
Declaro ante vosotros que mi vida entera, ya sea larga o corta, será dedicada a vuestro servicio y al servicio de nuestra gran familia imperial a la cual pertenecemos todos.
Todo lo que un hombre emancipado se pregunta es qué objetos le atraen más, y cuáles son los medios para conseguir esos objetos. El hacer bien es saber lo que tú quieres. Ahora, cuando tú no estás satisfecho contigo mismo, es porque tú vas en busca de algo que no quieres.
El papel paraguayo –no el papel del libro, de la revista o del diario, sino el papel moneda- vale, según dicen, cada vez menos. Hay gentes que se consternan ante este fenómeno. Yo no: me felicito de que el dinero pierda su valor, y deseo que llegue el día en que no tenga ninguno. Entonces dejaremos de ocuparnos de él, y nos habremos emancipado de una superstición que nos rebaja.
El hombre, por lo menos, es música; un tema magnífico que convierte también en música su vastísimo acompañamiento, su matriz de tormentas y estrellas. El hombre mismo en su condición es eternamente una belleza en la forma eterna de las cosas.
Es un magnífico orador, conoce el arte de no decir nada en una gran arenga
La sangre es para nosotros el símbolo de la vida. Circula sin cesar por el cuerpo, desde la concepción hasta la muerte; pasa del cuerpo de la madre al del niño; bate las arterias en la vigilia como en el sueño; nunca interrumpe su curso. La sangre de los antepasados fluye a través de las generaciones, uniéndolas en un ingente conjunto, sometido al sino, al ritmo, al tiempo.
Fomenta sin cesar falsos amigos.