Vivir sin ti es posible, sin mayor dificultad, vivo porque tengo un nombre, un número de cuenta y mi carnet electoral, vivo porque así le llaman a ese combustible absurdo de moverse por ahí, vivo como lo hacen todos, vivo porque algunos creen que es abrir los ojos, vivo aunque me muero a diario porque tú ya no estás
Ante tanto imbécil con carnet de opinante, los sabios callan
Se mi piace Roma? Sì, checché ne dicano... Ad abitarci no, perché CI si consuma troppo di politica: non si può vivere in un mondo di ossessi politici.