No ser descubierto en una mentira es lo mismo que decir la verdad
Porque sin ti no hubiera descubierto como una jarra de agua en el desierto la mina antigua de mi poesía.
Qué desamparado se siente uno cuando tiene una taza llena de café en la mano y comienza a estornudar.
El pobre todavía anda desamparado por el mundo. Busca la justicia, vota a las izquierdas, a las derechas, y no sabe dónde ponerse. En definitiva, vota a los políticos y en los políticos ya no se puede creer. Y eso revuelve las tripas de los pobres.
Alguien que se cree abandonado está leyendo, y le duele que la página que quiere pasar esté cortada, que ya ni siquiera ella lo necesite.
La poesía siempre ha sido minoritaria, y quizá ahora más. Exige un lector sin prisas, abandonado al texto, en el lugar y el momento adecuado. La poesía necesita apoyo y puede que lo encuentre en internet, con sus blogs y foros regidos por el apasionamiento de los lectores.