La Iglesia aprobaba esta política y aportó el apuntalamiento religioso del apartheid sugiriendo que los afrikáners eran el pueblo escogido de Dios, mientras que los negros eran una especie subordinada a ellos. En la visión del mundo que defendía el afrikáner, apartheid y religión marchaban codo con codo
La felicidad ah caminado codo a codo conmigo; pero la fatalidad en absoluto conoce tregua: el gusano esta en el fruto, el despertar en el sueño, y el remordimiento está en el amor: tal es la ley. La felicidad ha caminado codo a codo conmigo.