El estado naciente es transitorio, cuando todo funciona bien el enamoramiento termina en amor, en una institución. La relación que hay entre estado naciente y amor es: despegar, volar, y aterrizar. Surge el estado naciente, se ejecuta en la relación y muere, o pone los pies en el suelo
Los enamoramiento están enormemente sobrevalorados. El enamoramiento se compone de un cuarenta y cinco por ciento de miedo a no ser aceptado, de otro cuarenta y cinco por ciento de esperanzas maníacas de que, en esta ocasión, semejante miedo será desmentido; y, finalmente, de un diez por ciento de una frágil confianza en las posibilidades del amor.