Ésa es una suerte de las viudas, ningún contratiempo les impide mejorar al hombre con el que convivieron y entre más tiempo pasa, mejor recrean el mundo idílico que alguna vez soñaron.
Por los jóvenes hemos de estar dispuestos a soportar cualquier contratiempo y fatiga.
Las personas y las organizaciones tienen dificultad de comprometerse en un futuro cuando existe incertidumbre.
Las derrotas no engrandecen nada por desgracia, pero también uno se da cuenta de la dificultad de lo que he hecho hasta hoy. Ayuda a valorar todo lo que he hecho anteriormente.
Las ideas justas, por sobre todo obstáculo y valla, llegan a logro.
La actual preocupación casi histérica por la seguridad es en el mejor de los casos un derroche de recursos y un obstáculo para el espíritu humano, y en el peor de los casos una invitación al totalitarismo. Se necesita con urgencia educación pública.
No estoy a favor del matrimonio entre hermanos porque como usted sabe existiría en ese caso el impedimento de consanguinidad.
El que renuncia a un derecho solamente se quita de en medio para poder gozar del mismo sin impedimento de su parte.
La leve tribulación de un momento nos produce un pesado caudal de gloria eterna.
No hay hombre en el mundo sin tribulación o angustia, aunque sea rey o papa
Con la concordia crece lo pequeño; con la discordia se arruina lo más grande
De ti, furia, de ti justicia espero, si no la hay en los dioses soberanos: mueve el infierno en mi venganza fiera contra estos insolentes dos hermanos; y la corona que manché primero con sangre de mi padre, tú en tus manos recibe, y con veneno del infierno pon en ella discordia y odio eterno.
Ante cualquier desavenencia no caigamos en el error de dudar o bien de su inteligencia, o de su buena voluntad.
Nos convertimos en esfinges, aunque falsas, hasta el punto de no saber ya quiénes somos. Porque, por lo demás, lo que somos es esfinges falsas y no sabemos lo que realmente somos. El único modo de que estemos de acuerdo con la vida es que estemos en desacuerdo con nosotros. Lo absurdo es lo divino.
No puedo decir que no estoy en desacuerdo contigo.
A pesar de que es malo; peor es silenciarlo, pues todas las verdades silenciadas acaban por destilar veneno.
Hay muchos medios de hacerse rico, pero muy pocos de hacerlo con honradez; la economía es uno de los más seguros, a pesar de que tampoco es del todo inocente, porque resta una parte a la caridad
El viaje se transforma en una estrategia para acumular fotografías. La actividad misma de fotografiar es tranquilizadora, y atempera esa desazón general que se suele agudizar en los viajes.
Toda aflicción que llega acaba por irse. Así sucede con las glorias y las tragedias del mundo
Se les dice a los cristianos, no solamente que no se depriman ante sus sufrimientos sino que se alegren. Más aún, que se alegren no sólo porque la aflicción sea una disciplina que conduce a un bien futuro, sino porque es un privilegio presente, el privilegio de ser hechos semejantes a Cristo (1829, Sermones no publicados, Vol II, 26, p.197).
Eres como una espada de excelente temple, oculta en la oscuridad de la vaina, y cuyo valor es desconocido para el artífice. Por tanto, sal de la vaina del yo y del deseo, para que tu valor se haga manifiesto y resplandeciente ante todo el mundo.
Mi sable nunca saldrá de la vaina por opiniones políticas.
¿Puede haber mayor piedra de tropiezo que ? Todos los profetas hablaron del Mesías como el redentor de Israel y su salvador mató por la espada a los judíos, dispersó y humilló a los que quedaron, alteró la Torá y apartó del camino a la mayor parte del mundo para que sirviera a otro dios en vez de al Señor
No perded de vista jamás que no es la falta lo que pierde a una mujer, sino el escándalo, y que diez millones de crímenes ignorados son menos peligrosos que el más leve tropiezo que salta a los ojos de la gente.
En toda adversidad de fortuna, el mayor mal es haber sido antes felices.
La adversidad es como un fuerte viento que nos arranca todo menos las cosas que no pueden ser arrancadas. En ella nos vemos como realmente somos.
En la antinomía de la razón pura especulativa encuéntrase una contradicción semejante entre la necesidad natural y la libertad, en la causalidad de los sucesos en el mundo
El antagonismo para el hombre de mérito es el combate noble; para el envidioso es la cruel tortura
La civilización es precisamente el esfuerzo por ir más allá de la propia cultura, lo que hace sentir curiosidad e interés por otras. A quien se encierra en los usos que conoce, los considera sin disputa preferibles a todos los restantes y muestra antagonismo cerril hacia las formas de comportamiento humano que no comparte, siempre se le ha llamado bárbaro, nunca civilizado.
Todos los estilos responden al tiempo en el que se vive y yo no tengo el menor inconveniente en adaptarme a mi época.
Lo que llamamos progreso es el cambio de un inconveniente por otro.
No le temo a la muerte. Había estado muerto por billones y billones de años antes de que naciera, y no sufrí la menor inconveniencia por ello
Tengo para mí que todo ser humano es capaz de concebir la forma. El problema no me parece en modo alguno la existencia de la capacidad creadora, sino y en mayor grado, el hallar la clave que la ponga en libertad. (1939, Harvard).
No está lejos el día en que el problema económico estará en el asiento de atrás donde debe ir, y el corazón y la cabeza serán ocupados o re ocupados por nuestros problema verdaderos, los problema de la vida y de las relaciones humanas, de la creación, el comportamiento y la religión.
Es el peor enemigo el que aparenta no poder causar daño, porque intenta, inspirando confianza, asegurar su golpe de venganza
Lo más notable de esto es que todos los afectados, el conjunto de la sociedad, consideran y tratan a la crisis como algo fuera de la esfera de la voluntad y el control humanos, un golpe fuerte propinado por un poder invisible y mayor, una prueba enviada desde el cielo, parecida a una gran tormenta eléctrica, un terremoto, una inundación.
La primera captación en serio que tuve de las cosas fue cuando aprendí el arte de pedalear (con la mano) una bicicleta, colocada al revés e impulsé la rueda trasera preternaturalmente ligero. Yo amaba la desaparición de los rayos el modo como el hueco entre el eje y la llanta susurraba transparente...
Con el dinero ocurre al revés que con las personas: cuanto más libre, peor.
Hay, sin duda, hombres y mujeres a quienes no satisfará la igualdad, con quienes no habrá paz ni sosiego mientras no reine su voluntad sin traba alguna. Para esta clase de personas está hecha de molde la ley del divorcio. Nacieron para vivir solas, y a nadie debe obligarse a que asocie su vida con la de tales seres
La libertad es el derecho que cada hombre tiene para emplear sin traba alguna sus facultades en el conseguimiento de su bienestar y para elegir los medios que puedan servirle a este objeto
Este libro os digo que repaséis, que él os ha de encaminar para que, como Ulises, escapéis de tanto escollo como os espera y tanto monstruo que os amenaza.
Si con dar un solo golpe se atajaran las consecuencias y el éxito fuera seguro..., yo me lanzaría de cabeza desde el escollo de la duda al mar de una existencia nueva.
No hay extensión más grande que mi herida, lloro mi desventura y sus conjuntos y siento más tu muerte que mi vida
No podría sobrevenir mayor desventura que librar la imperfecta naturaleza humana del único látigo que la hace progresar: la necesidad y el hambre.
Era imponderable el desorden y desunión de aquel ejército, en todo el cual no había alguno que mandase, ni atendiese al bien común.
Lograremos la justicia como fruto de la solidaridad boliviana. Porque no ha de ser la justicia social engendro de odio y fruto de desunión nacional. Los comunistas de esta tierra, al ver que este pueblo se levanta libre y nacionalista, quisieran ponerlo en el potro de la lucha de clases, para descoyuntar como a Túpac Amaru el cuerpo de esta Patria que debe ser unida y fuerte.
La desdicha produce dos efectos: a menudo extingue todo afecto hacia los desdichados, y no menos a menudo extingue entre los desdichados todo afecto hacia los otros
Nadie acepta ya que las cosas pasan a veces sin que haya un culpable, o que existe la mala suerte, o que las personas se tuercen y se echan a perder y se buscan ellas solas la desdicha o la ruina.
[La poesía...] También da a la gente como nosotros, a la gente común y corriente, a la gente sensible, palabras para expresar lo fundamental de lo cotidiano que es el encuentro y el desencuentro del amor, de la muerte, el deseo, es decir, las cosas pequeñas y esenciales de la vida.
Y para acá o allá y desde aquí otra vez y vuelta a ir de vuelta y sin aliento y del principio o término del precipicio íntimo hasta el extremo o medio o resurrecto resto de éste o aquello o de lo opuesto y rueda que te roe hasta el encuentro y aquí tampoco está y desde arriba abajo y desde abajo arriba ávido asqueado por vivir entre huesos o del perpetuo estéril desencuentro a lo demás de más.
Amo el teatro porque me repugnan las ilusiones. No creo que el descontento – este espíritu de rebelión que me cabalga – pueda al fin aquietarse. Cuando parece reducido al silencio, siento el olor de la mentira que penetra en mi nariz. Si el descontento se aquieta, no sabría que hacer con el teatro.
Se supo que yo estaba descontento con los publicos numerosos. Sentia que el negocio se apoderaba de nosotros. Me sentia cada vez peor cuando el publico gritaba durante dos horas en vez de escuchar lo que tocabamos.
No significa que Copérnico no haya prestado atención a los pasajes de la Sagrada Escritura, pero una vez así demostrada su doctrina, estaba por cierto persuadido de que en modo alguno podía hallarse en contradicción con las Escrituras, que se las comprendiera correctamente
Dios y la creación son uno, Dios y la creación están infinitamente distantes; esta contradicción fundamental se refleja en la contradicción que existe entre lo que es necesario y el bien. Sentir la distancia, esta separación, es crucifixión.